Los franceses y los turistas pasaban trabajos el sábado para llegar a sus destinos navideños en medio de huelgas contra los planes del gobierno de elevar la edad de jubilación a 64 años.
Los problemas con los trenes se vieron aliviados ligeramente el sábado por un plan de la autoridad ferroviaria del sistema SNCF de informar a los pasajeros con varios días de antelación y proponer cambios de boletos.
Aun así, apenas la mitad de los trenes de alta velocidad estaban en servicio y los trenes regionales, incluso en el área de París, seguían severamente interrumpidos.
En la capital, ocho de las 14 líneas del metro estaban cerradas y muchas otras funcionaban erráticamente.
En la estación parisina de Saint-Lazare, con servicio hacia el oeste de Francia, Jean Baptiste Beudon, se sintió aliviado porque su tren no fue cancelado.
Recibimos confirmación dos o tres días antes de la salida, pero incluso así nos preocupaba», dijo.
Aurelie Lecerf, que viajaba con sus hijos, comentó:
Llegamos a las seis de la mañana para tomar el tren. El último estaba lleno, pero podemos tomar el próximo».
Se espera que millones de franceses viajen en los próximos días para sus reuniones navideñas con la familia.
Muchos han buscado alternativas, usando servicios de autos o compañías de autobuses, que han registrado un alza en las reservaciones.
La mayoría de los sindicatos de transporte han convocado a la continuación de las huelgas durante los feriados, luego de que las negociaciones entre el primer ministro y los líderes gremiales no fructificaron esta semana.
Sondeos recientes muestran que la mayoría de los franceses respaldan los paros, por temor de que tendrán que trabajar más tiempo por pensiones más bajas, pero la mayoría quiere que las huelgas sean suspendidas durante los feriados.
AP