Con un compromiso fijo para el cuidado de la casa común, este trabajo colaborativo es pionero en América Latina para la mitigación del deterioro ambiental.

Según la ONU, la crisis climática es uno de los desafíos más imponentes de nuestros tiempos, y si bien se han tomado acciones al respecto, estas no son suficientes para mitigar sus efectos devastadores. Ante esto, la Ibero Puebla, bajo el firme compromiso de fomentar el cuidado de la casa común, presentó la Estrategia de bioeconomía circular y social del estado de Puebla.

Este instrumento es resultado de una serie de mesas de trabajo colaborativas con el Gobierno de Puebla, que tiene como objetivo promover la gestión sustentable de los recursos naturales, reducir la huella de carbono y revalorizar los residuos con acciones para la mitigación del cambio climático.

El rector de la Universidad Jesuita, Mario Patrón Sánchez, celebró este esfuerzo llevado a cabo en el marco por el Día Internacional del Medioambiente, en el que, para él, es necesario generar una agenda de trabajo para el cuidado de la casa común. Sobre todo, con una visión humana que ponga a las personas y los bienes comunes en el centro.

Esta estrategia fue elaborada por el Instituto de Investigaciones en Medio Ambiente Xabier Gorostiaga, SJ. Su directora, la Dra. Valentina Campos Cabral, remarcó que “estamos en un momento decisivo para actuar. No obstante, las acciones tienen que ser más robustas, comprometidas y asumidas por todas y todos”. Por ello, la guía marca la pauta frente a la problemática.

En la presentación de esta estrategia estuvieron presentes diversas autoridades estatales como el Mtro. Jorge Luis Zenil. El director de gestión de Cambio Climático, Ciudades Inteligentes y Transición Energética de la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial del Estado de Puebla, profundizó en la estructura de este innovador plan.

La estrategia de bioeconomía circular y social se concentra en cuatro ejes: la conservación del patrimonio biocultural del estado; el desarrollo de modelos industriales y de energía biocirculares; la generación de negocios circulares e innovación social, y la construcción de infraestructura circular y sustentable.

Por medio de estas acciones, eJorge Zenil explicó que se pretende tener un impacto directo a la mejora del medioambiente con la reducción de emisiones de dióxido de carbono y residuos, con el aumento de la demanda y uso de materiales reciclados en los diferentes sectores de la sociedad, y con el incremento de la cantidad de organizaciones sociales y empresas cooperativas.

Beatriz Manrique, secretaria de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, ilustró la implementación de esta estrategia en el estado como “un instrumento único en Puebla. Es pionero en bioeconomía circular, pero además con el enfoque social e inclusivo que no podía estar ausente al salir de un trabajo conjunto con la Ibero Puebla”.

Héctor Arronte Calderón, subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía del estado y egresado de la IBERO Puebla, se dijo entusiasmado por los beneficios que esta estrategia de bioeconomía traerá a la industria y la economía poblana. Recordó que una de las finalidades que también se plantea es que el desarrollo económico llegue a todo el estado.

El enfoque internacional también estuvo presente gracias a Saúl Pereyra García, gerente de Acción Climática del Instituto de Recursos Mundiales —WRI, por sus siglas en inglés—. Para él, con este documento “el gobierno de Puebla se pone a la vanguardia en los instrumentos de política que existen actualmente gracias a su visión diferente”.