Ciudades estadounidenses como Nueva York, Los Ángeles y la misma capital del país se mantuvieron bajo toque de queda, ante las las manifestaciones convocadas en días pasados en memoria de George Floyd.
Los manifestantes en Washington DC se mantuvieron el lunes por la noche alejados del perímetro cercano a la Casa Blanca, por la tarde un grupo fue rebasado tras un despliegue de las fuerzas de seguridad, que después se identificó que intentaban liberar el camino alrededor de la Iglesia Episcopal de Saint John, donde Donald Trump se tomaría una foto.
Después del anuncio del presidente del despliegue de militares algunos manifestantes salieron a las calles de la capital, aún después del toque de queda, anunciado para las 19:00 horas, pero aproximadamente a la media noche las calles estaban vacías por el despliegue de guardias que los enfrentaron.
Durante una entrevista para CNN la alcaldesa de Washington DC, Muriel E. Browser, se declaró molesta por las acciones ordenadas por Trump contra los habitantes de la ciudad, sobre todo por interrumpir las protestas vespertinas que no violaban las imposiciones de su gobierno y contra las que se emplearon gases y balas de goma para que pasara el presidente.
Afirmó que no consideraba correcto que las fuerzas militares fueran empleadas en contra de los mismos compatriotas, mucho menos durante las protestas que han actuado de forma pacífica.
Justo después de que se levantara el toque de queda, a las 6:00 horas, algunos ciudadanos salieron a las calles para continuar con las protestas en la zona norte de la capital, donde se mantenían algunos miembros de las fuerzas de seguridad.
La ciudad de Nueva York también declaró un toque de queda a partir de las 23:00 por las protestas para exigir justicia por la muerte de George Floyd, después de poco más de 75 años de no implantar esta medida, sin embargo algunos manifestantes salieron a las calles.
Algunos voluntarios conocidos como “Guardian Angels” se colocaron a las afueras de las tiendas de lujo de la ciudad para protegerlas, ya que han sido los puntos más atacados por los manifestantes.
En la ciudad de Los Ángeles no se habían impuesto el toque queda desde 1992, de acuerdo con las autoridades fue impuesto porque se afectó la propiedad privada y se pone en riesgo la vida de los ciudadanos durante la noche.
En la ciudad de Saint Paul, Minnesota, las autoridades detuvieron aproximadamente a una docena de ciudadanos por romper el toque de queda y protestar afuera del capitolio del estado.
De acuerdo con un informe de CNN los miembros del Pentágono han demostrado sus preocupaciones por las acciones de Donald Trump contra los ciudadanos que protestan, aunque aún no se ha emitido un posicionamiento oficial al respecto.
En distintas ciudades también se denunció el uso de armas de fuego en contra de manifestantes y policías sin reconocer la procedencia de los disparos, hasta el momento aún se investiga.
Floyd, un afroamericano murió la semana pasada después de que un policía en Minneapolis, Minesota, le detuviera y colocara contra el piso hasta dejarlo sin aire, posteriormente fue traslado a un hospital donde murió de asfixia.