Los senadores José Narro Céspedes y Napoleón Gómez Urrutia, acompañados de la Unión de Colectivas de Madres Protectoras, “Caminemos Juntas”, anunciaron que presentarán una iniciativa denominada “brazos vacíos”, para salvaguardar el derecho humano a la salud de las mujeres que, en algún momento de su vida, tengan que enfrentar la muerte fetal o perinatal de un hijo.
El senador Narro Céspedes explicó que la propuesta busca reformar la Ley General de Salud, la Ley Federal del Trabajo y la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado, para apoyar a las mujeres que atraviesan por una situación de esta índole.
Dijo que es fundamental brindar una atención diferenciada, multidisciplinaria e integral, en el proceso de afrontamiento y duelo sobre la muerte fetal y perinatal, pues atravesar por esta experiencia genera un impacto psicológico muy fuerte y duradero para las mujeres y sus núcleos cercanos.
Quienes atraviesan por una situación de este tipo, pueden presentar depresión, temor y angustia, apuntó el senador durante una conferencia de prensa.
Advirtió que la legislación actual no contempla la protección a la mujer por un hecho de este tipo, así como tampoco su tratamiento y protocolos de atención y actuación, por tanto, no se les conceden los días necesarios para tratar el tema del duelo.
Por ello, indicó, es necesario impulsar un enfoque multidisciplinario, para evaluar no sólo las causas de la muerte fetal y perinatal, sino también la exposición al estrés y trastornos psicológicos que enfrentan las mujeres y su familia.
Narro Céspedes precisó que la iniciativa contempla protocolos de atención integral y humanizada del duelo, para garantizar que las mujeres reciban una tención profesional y humanizada, con el acompañamiento clínico y psicoemocional que les ayude a enfrentar su duelo.
También establece que las autoridades sanitarias capaciten al personal profesional, auxiliar y técnico, para abordar este tema con sentido ético, afectuoso y humanitario, argumentó.
De igual forma, señaló, propone un descanso laboral, debido a que las mujeres se encuentran en un estado de salud físico, psicológico y biológico que no les permiten tener condiciones para sobreponerse de manera inmediata.
Refirió que, en México, de acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2020 se registraron 22 mil 637 defunciones fetales, lo que significa que este es un problema de salud, por ser un fenómeno frecuente.
“Queremos reafirmar la convicción de tutelar los derechos humanos y garantizar los derechos de las mujeres, para crear un piso parejo para ellas”, puntualizó el legislador.
En tanto, el senador Gómez Urrutia dijo que es fundamental visibilizar un problema que no ha sido correctamente atendido en el marco jurídico vigente, por lo que se deben otorgar protecciones para que las mujeres tengan las herramientas necesarias que permitan sobrellevar este tipo de situaciones.
Sin duda, apuntó, se trata de un suceso traumático, pues lleva consigo consecuencias que afectan la vida personal y familiar de las mujeres, con síntomas depresivos a corto y largo plazo, o sentimientos de culpabilidad que las acompañan en su vida cotidiana.
La iniciativa, precisó, es para que todas aquellas mujeres que desafortunadamente han sufrido la muerte fetal o perinatal de un hijo, tengan la adecuada protección física y mental.
Por su parte, la activista Mildret Sainz agregó que la iniciativa es sumamente necesaria, para combatir un problema de salud psicoemocional y físico, porque las mujeres actualmente no tienen derecho al duelo y a la recuperación, además de que se les exige que se reincorporen inmediatamente a sus lugares de trabajo.
Foto: Senado