El coordinador del Grupo Parlamentario del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, aseguró que el arranque de la gestión del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, es una oportunidad para revitalizar y potenciar la relación de México con aquel país, y fortalecer el desarrollo de nuestra región.

En un comunicado, destacó que la agenda entre ambas naciones es muy extensa y abarca temas como migración, comercio, medio ambiente, energía, seguridad, infraestructura, educación, cultura, ciencia, tecnología e innovación, el cuidado de los derechos laborales y, por supuesto, de manera primordial y urgente, el combate al Covid-19 que, dada la vecindad, afecta por igual a sus habitantes.

Asimismo, hizo votos porque, sin comprometer la soberanía e independencia de México, la relación bilateral entre los dos países trascienda los buenos deseos que ambos mandatarios han expresado y, con la misma decisión mostrada en los primeros días de gestión del presidente Joe Biden, se concrete en una estrategia para avanzar en los temas comunes.

“De inicio, lograr la unidad entre los estadounidenses es un buen comienzo para el recién nombrado presidente del vecino país del norte. Ojalá que esto lo entienda nuestro primer mandatario y deje de dividirnos, deje atrás el discurso de odio, que convoque y concilie internamente para empezar a crecer junto con ellos”, precisó.

El líder parlamentario señaló que generalmente la costumbre en la diplomacia estadounidense establece que las dos primeras visitas de Estado del nuevo presidente sean con sus homólogos de Canadá y de México debido al peso e importancia de la relación entre estos países y para abordar temas de la agenda bilateral.

Romero Hicks consideró que la llegada del presidente Joe Biden es una buena noticia para los más de 11 millones de migrantes indocumentados que esperan ser beneficiados con la obtención de la ciudadanía; así como para los jóvenes “dreamers”, que mediante becas y permisos de trabajo buscan su permanencia legal; hay 545 infantes que fueron separados de sus padres por la política migratoria de tolerancia cero; y hay más de 100 mil solicitantes de asilo que esperan del lado mexicano regularizar su situación migratoria.

En materia comercial, en el marco del T-MEC, queda a los tres países firmantes cumplirlo a cabalidad ya que por ahí pasan horizontalmente los temas laboral, educativo, energético y de medio ambiente, en los que hay mucho que trabajar a nivel diplomático para evitar desacuerdos.

En cuanto a seguridad, comentó que se debe tener muy claro el antes y el después con relación a la última administración estadounidense y atender decididamente en conjunto, los graves problemas como el tráfico de armas y los estupefacientes, la delincuencia organizada y los profundos daños que generan en ambos lados de la frontera. Y en forma singular, el combate a la trata de personas, que constituyen todo un reto para la diplomacia de Estados Unidos y México.

En este contexto, el gobierno del presidente López Obrador tiene la oportunidad de recomponer el camino andado en estos dos años, para trazar horizontes de futuro, de mirarnos de manera franca y saber que podemos ser amigos, socios y vecinos en la colaboración, ya que compartimos más que una frontera común que supera los tres mil kilómetros.

“Las y los diputados panistas esperan que el presidente Joe Biden, como demócrata y político de carrera, privilegie a las instituciones y que sus prioridades económicas de corto plazo sea estimular la reactivación, algo que en México no se ha aplicado por una necedad del presidente López Obrador; si quiere verse en el espejo del vecino del norte concluirá que esa es la solución de muchos de nuestros males”, aseguró.

“Necesitamos colaborar y caminar juntos, sobre todo porque internamente aquí en 2020 la economía mexicana hundió su crecimiento en alrededor de 9 por ciento, con ello no se han podido recuperar 2.9 millones de empleos y los que se han creado son más precarios en los ingresos que los que se perdieron, por la falta de apoyos, de acuerdo con las cifras oficiales del INEGI”, agregó.

Romero Hicks destacó que los antecesores del presidente Joe Biden, sin importar su filiación política, han ofrecido unidad y apoyo al nuevo mandatario con el fin de acabar con la división entre los ciudadanos, una muestra más de que a su vez en México tenemos que hacer esfuerzos en bien de la unión y de superar nuestros problemas, finalizó.