Camila Sales, de 22 años y madre de un bebé de 18 meses, trabajaba como vendedora para una firma de cosméticos en Cascavel, al noreste de Brasil. Tras sus buenos resultados, fue reconocida.

“Camila estaba contenta porque esperaba desde hacía tiempo recibir el premio por sus ventas. Podía elegir entre accesorios para el maquillaje o el alisador”. Así lo comentó Vania Ramos, cuñada de Camila, al portal brasileño de noticias G1 Globo.

Y una tarde, al salir de bañarse, la joven quiso utilizar su premio… pero las condiciones eran las peores. “Ella estaba en la cocina, el suelo estaba húmedo, ella descalza y con el pelo mojado”, agregó Vania.

El contacto del alisador con el cabello mojado de Camila resultó en una fatal descarga eléctrica. “Se quedó con la lengua enrollada y su esposo intentó ayudarla. Ella hacía un esfuerzo por hablar, pero no lo consiguió, y se fue apagando, quedando morada“, agregó la mujer.

A decir de Ramos, parte del alisador se derritió como resultado del calor generado y quedó pegado al rostro de su cuñada. Y aunque fue trasladada de urgencia al hospital, ya no pudo hacerse nada.

Prevención

Aunque aún se desconoce la marca del alisador utilizado por Camila, se sabe que el contacto de aparatos eléctricos en el cabello requiere de ciertas precauciones.

Philips, una de las firmas que cuenta con este tipo de productos, señala que estos aparatos nunca deben utilizarse con el cabello mojado.

“Se corre el riesgo de que se produzcan descargas eléctricas o daños en el aparato. Cuanto más mojado esté el cabello, más vapor producirá el moldeador”, señala en su página web.

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