Londres, 8 Jul (El Informador).- Presentado como un marido violento con su ex esposa Amber Heard por el diario The Sun, el actor Johnny Depp sentó en el banquillo de la justicia al tabloide británico en un juicio que se inicia este martes con una lista de testigos digna de un casting de estrellas.
El actor de 57 años, que encarnó a Jack Sparrow en la saga «Piratas del Caribe» reprocha al diario británico y a su propietario «News Group Newspapers» (NGN) que dieran por hecho, en un artículo publicado en abril de 2018, que había golpeado a su exesposa, la atriz estadounidense Amber Heard.
Johnny Depp y Amber Heard se conocieron en el rodaje de «Rhum Express» en 2011 y se casaron en febrero de 2015 en Los Ángeles.
La pareja se divorció a principios de 2017, después de poco más de un año de matrimonio. La actriz de 34 años le acusó de «años» de violencia «física y psicológica», lo que Johnny Depp ha negado de plano.
En el proceso de divorcio, Amber Heard retiró su denuncia y Johnny Depp le dio 7 millones de dólares que la actriz entregó a asociaciones.
Además de los dos exesposos, que anunciaron su presencia en el juicio que tendrá una duración prevista de tres semanas ante el Tribunal Superior de Justicia, la cantante y actriz francesa Vanessa Paradis y la actriz estadounidense Winona Ryder tienen previsto testificar por videoconferencia a favor de Johnny Depp.
Inicialmente previsto para mediados de marzo, el juicio fue atrasado debido a la pandemia del nuevo coronavirus.
En un testimonio escrito presentado para el juicio, Vanessa Paradis, que fue pareja del actor durante 14 años, le describe como un «hombre y un padre dulce, atento, generoso y no violento».
Los abogados de Johnny Depp se basan también en el testimonio de Winona Ryder, que tuvo una relación con Johnny Depp en los años 1990. «Nunca fue violento conmigo», aseguró la actriz.
La defensa del Sun se basa en 14 acusaciones de violencia contra el actor entre principios de 2013 y mayo de 2016.
Hasta el último momento intentó lograr que se archivara la querella por difamación, arguyendo que Johnny Depp había ignorado una orden del Tribunal que le instaba a comunicar una serie de SMS en los que habría pedido drogas a su asistente.
Estos mensajes fueron enviados a finales de febrero-inicios de marzo de 2015 por la estrella hollywoodiense cuando se encontraba en Australia rodando una película, poco antes de un presunto incidente que Amber Heard describió como «un suplicio de tres días de agresiones físicas».
Johnny Depp hablaba de «píldoras alegres» y una «cosa blanca», en referencia aparente a las pastillas de MDMA (éxtasis) y a cocaína, según la defensa del NGN.
El juez Andrew Nicol constató el lunes que no se había respetado la orden de desvelar estos mensajes pero lo ignoró y permitió proseguir con el juicio.
En cambio, el juez rechazó el jueves la demanda de Johnny Depp de que se publiquen «todas las comunicaciones» entre Amber Heard y dos hombres de los que se sospecha que mantuvieron una relación con su exesposa. Se trataría, según el actor, del fundador de Tesla y SpaceX, Elon Musk (que aparecía en los contactos como «Rocketman») y el otro sería el actor James Franco.
De hecho, Johnny Depp ha presentado una querella por difamación contra Amber Heard en Estados Unidos.