San Sebastián, 24 Sep (Hola).- El Festival de Cine de San Sebastián ha recibido a uno de sus grandes protagonistas, Johnny Depp, que recibe el premio Donostia a toda su carrera en la edición número 69 del certamen. El actor estuvo ya el pasado año presentando su película documental El fotógrafo de Minamata, cuando aún no se había resuelto su juicio contra los tabloides británicos por tildarle de maltratador. Ahora vuelve por todo lo alto, pese a haber perdido ese caso y no tener siquiera posibilidad de apelación, consciente de que la oportunidad que le ofrece esta semana cinéfila del País Vasco no será tan fácil de encontrar en otros lugares del mundo. Caída la noche, el Zinemaldia se ha vestido de gala para homenajear al protagonista de Piratas del Caribe, que ha llegado luciendo un traje negro con camisa a juego y sus ya tradicionales gafas oscuras.
«Soy muy muy pequeño ahora mismo, ante vosotros», ha asegurado Johnny, ya con el premio en mano y subido al escenario del Palacio de Congresos y Auditorio Kursaal con una tímida sonrisa. «Estoy profundamente agradecido, es un honor recibir este premio. Hoy estoy aquí por un único motivo, por la gente, porque el cine es para las personas. La gente manda y aquí hay un montón de jefas y jefes», ha declarado el artista estadounidense al recibir el galardón de manos del director del Zinemaldia, José Luis Rebordinos. «Este es un festival de cine de verdad en cuyo eje están las películas y las personas que nos dedicamos a esto. Gracias al Festival y a toda la ciudad por esta cálida acogida», ha afirmado el intérprete. Además, ha dado la enhorabuena a la «fantástica y maravillosa» Marion Cotillard, que el viernes recibió el primer Premio Donostia de esta edición, y se ha mostrado «lleno de humildad» por compartir la suerte con ella.
Como le pasa desde hace casi 40 años, Johnny ha levantado pasiones en San Sebastián a lo largo de la jornada, y durante el photocall de la tarde no ha dudado en saludar a sus fans, que se agolpaban a los pies del paseo marítimo. El protagonista de Sweeney Todd no ha querido dar entrevistas personales, pero no ha tenido problema en responder a las preguntas de una rueda de prensa en la que no se han dejado dudas en el aire. Como no podía ser de otra manera, salió el tema de la conocida como «cultura de la cancelación», el movimiento que pide que aquellos rostros conocidos que, como él, se vean envueltos en escándalos que cuestionen su integridad moral sean «cancelados», es decir, vetados o apartados de la vida pública. «Nadie está a salvo de nada y nadie lo estará porque estás a una frase, a una sola, de perder pie», aseguró el intérprete, que continúa defendiendo su inocencia ante las acusaciones de Amber Heard.
Diversos sectores como la Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales, calificaron que se le otorgara el premio a Johnny Depp como «un error desde el punto de vista ético». Ante las protestas suscitadas, el director del certamen, José Luis Rebordinos, salió al paso de las críticas: «El rechazo a cualquier conducta violenta o de acoso, así como la presunción de inocencia, forman parte de nuestros principios éticos», declaraba el pasado mes de agosto, al tiempo que defendía que «de acuerdo con los datos probados» de los que dispone el Zinemaldia, «Johnny Depp no ha sido detenido o condenado por ninguna forma de agresión contra ninguna mujer».
Sin embargo, estas declaraciones en defensa del actor no han conseguido acallar las críticas ni borrar la curiosidad que suscita la opinión de Johnny Depp al respecto: «No importa si un juicio mediático concreto ha dicho otra cosa o se ha tomado una licencia artística innecesaria. Donde haya una injustica, seas tú o alguien a quien amas o creas, no te rindas. No lo dejes estar. Porque esa persona te va a necesitar», ha comentado el protagonista de Charlie y la fábrica de chocolate, que ha bromeado con que si pudiera hablar consigo mismo hace cuarenta años le diría que no empezara en la industria.
La expareja lleva en esta batalla legal internacional desde su ruptura en 2017: a pesar de que la actriz retiró su denuncia de malos tratos antes de que se finalizara el divorcio, se han enfrentado en varios casos paralelos. El último en Londres (Reino Unido) y contra The Sun por llamar a Johnny maltratador, un juicio que perdió porque, según el juez el calificativo se encontraba amparado por el testimonio de Amber Heard. El próximo será en Virginia (Estados Unidos) en abril de 2022 por un texto publicado en el Washington Post en el que la actriz aseguraba ser víctima de violencia doméstica, aunque sin mencionar a manos de quién.
«Hollywood me está boicoteando», denunciaba Johnny Depp con rotundidad en una entrevista concedida en agosto a The Times. Según él, su filme El fotógrafo de Minamata estaría teniendo problemas para encontrar salas en las que proyectarla. Se trata de una historia real donde el intérprete se mete en la piel del fotoperiodista Eugene Smith, quien documentó y alertó a principios de los 70 de la dramática situación sanitaria derivada de una actividad industrial que padecía el pueblo japonés que da nombre a la cinta.