El presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Juan Díaz de la Torre, solicitó licencia para separarse del cargo.

En la 47 sesión extraordinaria del Consejo Nacional del SNTE, realizada en su sede en la Ciudad de México, Díaz de la Torre agradeció a los agremiados y defendió sus gestiones frente al sindicato.

«Mantuvimos su autonomía y su funcionamiento institucional, lo hicimos además sin prestarnos al juego sucio de la defenestración ni de la discordia. Logramos adaptarnos y transitar sobre cambios profundos en la legislación y operación de la política educativa de México.

«Frente a una amenaza a los derechos laborales de los maestros fuimos capaces de frenar la evaluación punitiva y poner el acento en la actualización y superación profesional del magisterio, que será el eje de nuestro sistema educativo en los próximos años», planteó en su mensaje ante los miembros de la cúpula magisterial.

En su discurso de despedida, Díaz de la Torre refirió que su renuncia busca frenar cacicazgos y propuso que la figura de presidencia del SNTE sea reemplazada por la de Secretaría General.

Con ello, dijo, el sindicato estaría actuando acorde a la nueva etapa de México.

«Personalmente estoy dispuesto a dar los primeros pasos para contribuir a esos objetivos, bajo el signo de lo que hoy se llama ‘la cuarta transformación nacional’.

«Por ello he tomado una decisión serena, responsable, reflexionada profundamente para el bien del sindicato y de la educación. He decidido solicitar a este Consejo Nacional una licencia definitiva al cargo», agregó.

Si el SNTE recayera en dirigencias con características de líderes pasados, afirmó, sería un retroceso.

«Estoy convencido de que no debemos repetir las experiencias pasadas de enquistar líderes fuertes carismáticos o morales que obstruyan la vida democrática, que terminan asumiendo por sí mismos las decisiones del sindicato», señaló.

Tampoco debe permitirse, abundó, que lleguen a la dirigencia quienes buscan enriquecerse desde el puesto.

«(El SNTE) tiene que dar ese paso definitivo para superar y dejar atrás aquellas experiencias de liderazgos patrimonialistas y excluyentes», expuso.

«Mi contribución sería precisamente interrumpir la historia de liderazgos morales y cancelar la sucesión de cacicazgos».

Subrayó que su renuncia no obedece a presiones externas.

«Esta solicitud de licencia no es, y debo reiterarlo para que no haya confusiones, no es un salto al pasado para regresar a los liderazgos vitalicios. Es precisamente un paso para cerrar el paso a las tentaciones del poder enfermizo, de la eterna ambición, lo digo sin ánimo de ofensa, ni descalificación», instó.

Consideró que es una oportunidad de realizar este cambio mediante el voto directo, libre y secreto de los agremiados.

«Lo digo convencido de que los nuevos tiempos, la gran oportunidad es conquistar la verdadera democracia sin tutelajes, ni dependencia de fracción o liderazgo moral alguno», acotó.

«Esta licencia no es derivada de influencias externas, sino en el ejercicio más claro de nuestra autonomía y el inicio de una nueva travesía hacia la etapa de nuestro sindicalismo democrático», dijo.

Esta salida se da luego de que la ex lideresa, Elba Esther Gordillo, difundiera un video en el que aseguró que pugnará por la dirigencia.

“A ellos, a los trabajadores de la educación, debo mi lucha el futuro del SNTE está más allá de protagonismo personales. ¡Vamos unidos, vamos sin miedo, vamos por el SNTE!”, sentenció Gordillo Morales a través de un video difundido en redes sociales.