(Quién).- La gala del Met tuvo una de las ediciones más icónicas, no solo por las celebrities que asistieron a la celebración, sino también por los looks que pudimos ver en la escalinata hacía el Museo Metropolitano de Nueva York. El tema de la última edición fue “ The Gilded Age” es decir la edad dorada de Estados Unidos, en específico de la ciudad de Nueva York. En la gala pudimos ver looks increíbles tales como el de la actriz Blake Lively en Atelier Versace, la influencer Emma Chamberlain en Louis Vuitton o incluso la modelo Gigi Hadid en Versace y Chopard. Sin embargo, uno de los conjuntos más icónicos fue el de Kim Kasdashian, quien se encargó de cerrar la alfombra roja de la Met Gala 2022.
Y es que Kim Kardashian robó muchas miradas al entrar a la escalinata del Museo Metropolitano de Nueva York luciendo el emblemático vestido que usó Marilyn Monroe al cantar Happy Birthday Mr. President. al presidente de Estados Unidos, John F. Kennedy. Sin duda alguna, fue una gran sorpresa para todos los asistentes ver a la empresaria de 41 años usar el vestido de la actriz estadounidense. Una de las cosas que causaron mayor impresión respecto al outfit de Kim Kardashian, fue que reveló en una entrevista que tuvo que bajar más de 7 kilos en tres semanas para poder usar el icónico vestido que usó Marilyn Monroe al cantar en el evento de recaudación de fondos para el Partido Demócrata en julio 1962. Incluso, la Kardashian reveló en esa misma entrevista que después se cambió y uso réplica exacta del vestido, ya que ella misma reconoció que se trataba de una pieza histórica de la moda y que no se atrevía a “sentarse, comer con él o correr el riesgo de dañarlo”.
Sin embargo, haber usado ese vestido por un corto periodo de tiempo y con todas las indicaciones de cuidado, no fueron suficientes para no causar daño en el vestido. El coleccionista Scott Fortner fue quien reveló un carrete de fotografías en donde se apreciaban los cambios que había ocasionado la empresaria cuando usó el vestido por la alfombra roja. En las fotografías que compartió el coleccionista Scott Fortner se puede ver cómo la tela se ha estirado demasiado debido a que se forzó la entrada al vestido. El estiramiento en exceso ocasionó que se rompiera en la zona del cierre de la parte de atrás. Incluso también se puede observar que faltan algunos de los cristales que adornan el diseño del vestido.
En 1962, Marilyn Monroe pagó 1,440 dólares por ese vestido, lo que actualmente equivale a 114 mil dólares. Sin embargo, en 1999 se vendió por primera vez en una subasta por más de un millón de dólares como parte de una venta del patrimonio de la actriz. Finalmente en 2016, el vestido se volvió a subastar por 4.8 millones de dólares en Julien’s Auctions y fue gracias a eso que terminó en el museo Ripley’s Believe It Or Not. Debido a que la empresaria Kardashian lo usó para posar frente a las cámaras en la escalinata del Museo Metropolitano de Nueva York, el valor del vestido subió a 10 millones de dólares. Así que, en caso de que Kim tenga que pagar por los daños del vestido, una cifra proporcional estaría arriba de los 10 millones de dólares.