México es un país de alta sismicidad, en donde la educación de protección ante la presencia de un sismo debe ser un tema vigente, no sólo en la escuela, debe estar presente en los hogares y empresas, y contar con protocolos para saber actuar antes, durante y después, ante un sismo.

El sismo de magnitud 5.7 registrado el día de hoy, a 14 kilómetros al Norte de Isla Veracruz, no registró consecuencias graves y algunas personas no lo percibieron.

México tiene algunas zonas sísmicas en donde no se han registrado temblores importantes en los últimos 100 años, como es el caso de la brecha sísmica de Guerrero, en la parte central de este estado, y el temblor registrado el día de hoy 3 de marzo de 2022, tuvo una intensidad baja en la ciudad de Puebla, por lo que se descarta que haya daños importantes en las construcciones, comentó Eduardo Ismael Hernández, catedrático de la Facultad de Ingeniería civil de la UPAEP.

México se encuentra ubicado en una zona sísmica importante, y encontramos tres fuentes sísmicas significativas, sismos con fallas de extensión o fallas normales; de compresión y transcurrente, según sea el caso.

El tema sísmico es muy complejo, es una situación de ocurrencia aleatoria tanto de fechas, intensidades y lugares, lo cual abre espacios para las dudas, por los periodos en que se están presentando y la gente se pregunta qué está pasando, y por ello, es importante que las personas siempre estén alerta e informada al respecto, manifestó Gerardo López Arciga, catedrático de la Facultad de Ingeniería Civil de la universidad.

López Arciga expresó que la normatividad sísmica es una de las más modernas del mundo, México es reconocido porque tiene grandes ingenieros que se dedican a la investigación de estos fenómenos y en el caso de la UPAEP, contamos con diferentes acelerógrafos que ayudan para conocer cómo se mueve el suelo, cómo se comporta y toda esta información contribuye para tener mejores argumentos para la prevención.

Dijo que se pueden observar grandes construcciones edificadas por la zona de San Andrés Cholula, que siguiendo con las recomendaciones de los reglamentos, se puede tener la idea de que el diseño de estas construcciones están hechas por gente muy profesional, ética y que las obras van a tener un buen comportamiento frente a un temblor de magnitud esperada.

Recordó que se vive en un país de alta sismicidad, en donde la educación de protección ante la presencia de un sismo debe ser un tema vigente, no sólo en la escuela, debe estar presente en los hogares y empresas, y contar con protocolos para saber actuar antes, durante y después, ante un sismo.

Eduardo Ismael, señaló que todavía falta mucho trabajo por hacer en el tema de peligro sísmico, es decir, conocer los niveles de aceleración de movimiento de los suelos en diferentes ciudades, en ese contexto lo mejor que podemos hacer es prepararnos desde el punto de vista de instrumentar las ciudades, de colocar más estaciones de registro sísmico, hacer los estudios pertinentes de zonificación sísmica para clasificar los tipos de suelo en función de sus propiedades dinámicas, y con ello, tener mejores prácticas del diseño y construcción de las edificaciones.

Asimismo, dijo que es importante fortalecer la sinergia que debe haber entre las autoridades, universidades, los colegios y los gremios que se dedican a la construcción.

Agregó que los sistemas de alerta sísmica deben ayudar, sin embargo, hace falta mucha inversión en varios rubros relacionados con estos sistemas y reconocer que este sistema funciona muy bien cuando los sismos vienen de zonas lejanas, como son las costas de guerrero, pero si se registra un fenómeno de esta naturaleza más cerca de la ciudad de Puebla, por ejemplo, en la ciudad de Tehuacán, seguramente no habrá mucho tiempo de antelación para poder reaccionar y mucho menos para un temblor local que se registrara al interior de la ciudad de Puebla.

Gerardo López y Eduardo Ismael enfatizaron que es importante conocer que el sistema de alerta sísmica es una cosa y las redes de registros o estaciones de monitoreo de la presencia de un sismo son otra, estas últimas son más importantes porque si no existieran estas estaciones de registro sísmico como son los sismógrafos y acelerógrafos, no funcionaría el sistema de alerta sísmica para prevenir a las personas.