Al igual que el resto de economías occidentales, la de Reino Unido sufrió una caída histórica en el segundo trimestre de 2020 por el impacto de la pandemia del coronavirus. Su producto interior bruto (PIB) experimentó una contracción récord del 20,4% entre abril y junio con respecto al trimestre anterior, cuando ya se retrajo un 2,2%, según los datos publicados este miércoles por la Oficina de Estadísticas Nacionales británica (ONS, por sus siglas en inglés). De esta manera, al encadenar dos trimestres seguidos de bajadas, el PIB británico ha entrado en recesión por primera vez desde 2009 (es decir, desde la crisis financiera).
La caída trimestral de la economía de Reino Unido, no obstante, ha sido levemente inferior a la pronosticada por el consenso de analistas (-20,5%). Pero igualmente ha sido la más fuerte entre las mayores potencias de Europa: la contracción en Alemania en el mismo periodo fue del 10,1%; en Francia, del 13,8%; en Italia, -12,4%; y en España, del 18,5%.
El desplome en el conjunto de la Eurozona fue del 12,1%. Pero el hundimiento británico no ha llegado a ser tan súbito como en Estados Unidos, donde la caída del PIB entre abril y junio alcanzó el 32,9%, según los primeros datos.
Con todo, la retracción trimestral del 20,4% es la más brusca desde que la ONS comenzó a recabar datos en 1955. En tasa interanual (es decir, en comparación con el mismo periodo del año pasado), el hundimiento del PIB británico en el segundo trimestre fue del 21,7%.
La actividad del sector servicios en Reino Unido retrocedió un 19,9% en el segundo trimestre, mientras que en la agricultura bajó un 4,8%, además de una caída del 20,2% en las manufacturas y del 35% en la construcción.
Por otro lado, la crisis del coronavirus provocó en el segundo trimestre del año la pérdida de 220.000 empleos en Reino Unido, lo que supone la mayor caída en el número de ocupados desde los tres meses comprendidos entre mayo y julio de 2009, según la ONS.
La tasa de paro se mantuvo en el 3,9%, en gran medida gracias al efecto de las medidas de suspensión del trabajo implementadas por el Gobierno.
Según el organismo estadístico, entre abril y junio el número de ocupados en Reino Unido era de 32,92 millones, lo que representa un incremento anual de 113.000 trabajadores, pero una caída de 220.000 ocupados en comparación con el primer trimestre del año.
De su lado, la tasa de ocupación del Reino Unido en el segundo trimestre se situó en el 76,4%, tres décimas por encima del nivel de un año antes, pero dos décimas menos que en el trimestre precedente.
Con información de El Economista