El secretario general de la ONU visitó el jueves los lugares donde se sospecha que se cometieron crímenes de guerra en Ucrania y, desde allí, condenó los «malvados» actos cometidos contra la población civil, instando a la rendición de cuentas.
La visita António Guterres a los suburbios de Kiev, Borodyanka, Bucha e Irpin, se produce nueve semanas después del inicio de la invasión rusa. El titular de la ONU instó a Rusia a «aceptar cooperar» con la investigación en curso iniciada por la Corte Penal Internacional.
«Cuando vemos este horrendo lugar, me hace sentir lo importante que es una investigación exhaustiva y la rendición de cuentas», dijo Guterres, hablando desde Bucha, donde las perturbadoras imágenes de civiles muertos tirados en la calle provocaron la indignación mundial a principios de este mes.
Y añadió: «Apoyo plenamente a la Corte Penal Internacional y hago un llamamiento a la Federación Rusa para que acepte cooperar” con ella.
Violencia absurda
Al inspeccionar los edificios destruidos en Borodyanka, al noroeste de Kiev, el Secretario General también calificó la guerra de «absurda».
«Debo decir lo que siento. Imagino a mi familia en una de esas casas que ahora están destruidas y quemadas», dijo. «Veo a mis nietas huyendo despavoridas, a parte de la familia finalmente asesinada. Así que la guerra es un absurdo en el siglo XXI. La guerra es el mal».
En Irpin, donde Guterres visitó el destruido complejo residencial de Irpinsky Lipki, dijo que el «horrible escenario demuestra algo que, por desgracia, siempre es cierto: los civiles siempre pagan el precio más alto».
A principios de este mes, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos dijo que se había sentido «horrorizada» por las imágenes que mostraban los cuerpos de civiles muertos que yacían en las calles de Bucha y en fosas improvisadas.
«Los informes que están apareciendo en esta y otras zonas plantean cuestiones serias e inquietantes sobre posibles crímenes de guerra, así como las graves violaciones del derecho internacional humanitario y las leyes internaciones de los derechos humanos», declaró Michelle Bachelet.