CIUDAD DE MÉXICO.

El reclamo desesperado de Adra Escamilla se ha viralizado y ha colocado en la mesa de debate la lucha por el tercer género, es decir, de las personas que se consideran no binarias.
No binario

La biología no es destino, tampoco el género asignado. Pero ¿se puede concebir nuestra existencia al margen de la masculinidad y de la feminidad? Muchos jóvenes creen que sí y lo hacen.

Se trata de un desafío político, con movimientos similares en otras partes del mundo, para construir alternativas a la conexión por la que se amarran nuestros cuerpos con alguna de las dos identidades históricas de la sexualidad.

Más que movimiento, las personas no binarias son expresión colectiva de individualidades posmodernas a quienes los colectivos LGBTTTIQ, particularmente de hombres transgénero, les han permitido identificarse entre sí. Si bien tienen empatía con la bisexualidad, su posicionamiento es ajeno al discurso de liberación sexual ya que no es su propósito cuestionar preferencias ni prácticas sexuales.

Al cuestionar la lectura binaria de la vida se proponen liberarse del género, de sus roles, de su apariencia. Parten desde lo que tienen a la mano: cuerpo y lenguaje. Neutralizan el género en las palabras mediante la sustitución de las letras “a” y “o” por la “e” que se proyecta ajena a lo femenino y masculino, nos ilustra Luis Manuel Arellano.

Andra Escamilla habla sobre el video que se hizo viral donde pide que le llamen ‘compañere’.

Hace algunos días se viralizó un video en el que Andra le exige respeto a uno de sus compañeros pidiéndole que le llame ‘comapañere’ en lugar de ‘compañera’. Desde en entonces, ha recibido burlas (demasiadas) por pedir un poco de empatía, por exigir el respeto que todo el mundo nos merecemos. Por lo que nos queda claro que no hemos aprendido nada.

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A partir del impacto en redes sociales, Andra compartió un video a través de su cuenta de TikTok donde habla sobre su identidad como trigénero y lo que sucedió con el video donde explota en medio de su clase en línea.

Andra explicó que no le molestaron los memes que hicieron, lo que sí le hizo sentir muy mal fue el acosó que recibió luego del video, pues se trata de una situación seria de ciberbullying y que no sólo le afectan a elle, también a otras personas integrantes de la comunidad LGBT+.

“Este video va a ser un poco serio porque resulta que me volví viral. No me molestan para nada los memes, creo que en un futuro publicaré un TikTok especial para reaccionar a los memes que me hicieron, pero esto va a ser un poco serio porque recibí muchos comentarios de acoso y cosas bastantes feas, a mí no me importa lo que digan de mí o lo que piensen, pero hay personitas a las que sí, compañeres de la comunidad LGBTQ+ que sí les afectó, y esto no está chido”, expresó Andra.

Andra llevaba tres semestres pidiendo que se le nombrara con los pronombres con los que se identifica, por lo que es entendible que en cualquier momento explotaría. Además, usuarios atacaron sobre la interrupción que hizo en clase, y Andra aclaró que en ningún momento tuvo un comportamiento agresivo.

Asimismo, Andra especificó que lo que vive todos los días es un caso de misgendering, es decir, cuando le imponen a una persona un género con el que no se identifica y no se siente cómoda.

Por desgracia, Andra sigue recibiendo críticas y burlas, incluso de figuras públicas como Chumel Torres.

El respeto no tendría que ser pedido, mucho menos en medio del llanto.

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