Londres, 12 Jun (Hola).- Asolo unos días de que se realice una conmemoración oficial por su cumpleaños 94 -que cumplió en abril pasado-, la Reina Isabel ha participado en su primera videollamada desde que comenzó la cuarentena. A pesar de que en los últimos meses se le había visto a través de los mensajes que dedicó a su pueblo y de algunas imágenes en las que se le vio desde en su versión casual cabalgando hasta celebrando con el Príncipe Felipe su cumpleaños; ésta fue la primera ocasión en la que participó en este método que se ha convertido en el favorito de los royals en las últimas semanas. Desde el Castillo de Windsor, donde pasa su aislamiento, se conectó para agradecer a los cuidadores en su semana.

Acompañada de la Princesa Anne, quien desde 2011 es la presidente de The Carers Trust, la Reina se conectó para congratular a los representantes de los cuidadores -personas que están al cuidado de un familiar enfermo o con alguna discapacidad- y agradecerles por su enorme labor. “Para marcar la Carers Week 2020, la Reina y la Princesa Real hablaron con un grupo de cuidadores que han apoyado en el Carers Trust para conocer más sobre los retos que enfrentan…el fondo provee de apoyo a los cuidadores alrededor de Reino Unido a través de sus socios, así como le da una voz a los cuidadores y destaca su trabajo al público general”, se lee en el mensaje que apareció en las redes del Palacio de Buckingham.

Sonriente y muy atenta, la Reina escuchó los testimonios de algunas cuidadoras y les dijo: “Ha sido interesante escuchar sus anécdotas e historias. Estoy muy impresionada por lo que ya han conseguido. Estoy muy contenta de poder haberme reunido con ustedes hoy”. A pesar de su edad, la Reina se mostró como toda una experta en estas nuevas tecnologías. Según contó Alexandra Atkins, una de las chicas que estuvo en la reunión, una secretaria se encargó de dejar conectada la llamada para que la Reina no tuviera problemas técnicos y que aunque era obvio que la monarca no estaba acostumbrada a este tipo de llamadas, se veía de lo más interesada.

A diferencia de la mayoría de los royals que se han mostrado en una versión más casual y relajada al trabajar desde casa, la Reina se mantuvo tan distinguida como siempre. Con la vista del Oak Room, en uno de sus acostumbrados vestidos florales de seda y un collar de perlas, la Reina demostró que como ha hecho toda su vida, se adapta perfectamente a las necesidades de los nuevos tiempos.