Francesco Totti, que trabajaba como directivo del Roma desde 2017, cuando acabó una trayectoria de 25 años como jugador romanista, dimitió este lunes de su cargo y convocó una rueda de prensa multitudinaria en la que arremetió contra los propietarios del club.
Totti, leyenda del Roma, con el que disputó 786 partidos en 25 años, acudió al Salón de Honor del Comité Olímpico italiano (CONI) y explicó durante más de una hora las razones que le llevaron a despedirse del club de su vida, una decisión extremadamente «dolorosa» causada por la compañía propietaria, que, dijo, es «el mal» de la entidad.
«Dimito como directivo del Roma. Consideradas las condiciones, creo que es algo necesario y correcto. Nunca he tenido la posibilidad de actuar de forma efectiva en el área deportiva», aseguró Totti, quien destacó que su objetivo era dar su aportación a nivel técnico en la elección del proyecto deportivo a seguir.
«Todos sabemos que se me forzó a parar de jugar. Entré en la directiva con mucha humildad porque para mí era una novedad. Se me prometieron muchas cosas, pero ninguna ha sido mantenida. Luego pasa el tiempo, razoné y entendí que no quería seguir a disposición de personas que nunca me han querido en ese rol».
También criticó explícitamente a la compañía estadounidense propietaria del Roma, presidida por James Pallotta, que «tiene la idea fija de quitar a los romanistas del Roma y que al final lo logró».
«Desde que llegó la propiedad americana (2011), intentó de todas formas apartarnos. Lo han querido y al final lo lograron», repitió el excapitán romanista, quien no aceptó el hecho de que este curso la sociedad avisara en el último momento a Daniele De Rossi, último referente del equipo, de que no le renovaría el contrato.
«Yo en septiembre dije a algunos directivos que, si pensaban no renovar a De Rossi, deberían decírselo ya. Porque era el capitán, había que respetarle. Al final pasó mucho tiempo. Yo hablé con De Rossi de forma privada, como amigo. Traté de hacerle entender lo que pasaría, pese a que yo fuera un directivo», dijo.
«En cambio hubo el mismo problema que se creó conmigo. Creo que es algo que (la propiedad) hizo a propósito», añadió.
Totti defendió en todo momento su amor por el Roma, expresó el deseo de que el club se ponga siempre en el centro y reconoció, con su habitual lenguaje directo, que prefería «morir» antes de vivir un día como el de este lunes.
Aseguró que «nunca» regresará al Roma mientras estén los propietarios estadounidenses, pero no excluyó regresar en un futuro si hay un cambio y un proyecto serio. De momento, informó de que seguirá yendo al Estadio Olímpico como aficionado.
Profundizando en lo ocurrido en sus dos años como directivo, Totti fue preguntado sobre su relación con el exdirector deportivo, el español Ramón Rodríguez Verdejo «Monchi».
«No hablaré de individuales. En mi primer verano como directivo (2017) se me pidió la opinión sobre un jugador y yo dije que para mí no era adecuado a ese Roma. No puedo decir el nombre, sería feo, pero acerté. ¿Monchi? Nunca hemos vuelto a hablar desde que dimitió», afirmó.