Los suicidios son un tema de salud pública en México, donde entre enero y junio de este año se registraron 2 mil 130 casos y 3 mil 665 intentos; en tanto, en todo 2019 se presentaron 4 mil 183 casos y 5 mil 464 intentos, de acuerdo con expertos en salud mental.

En la conferencia vespertina de este jueves sobre la situación del Covid-19 en México, los especialistas abordaron el asunto con motivo del Día Mundial para la Prevención del Suicidio, una práctica que, señalaron, ha aumentado en el país desde 2008.

«De 2008 a la fecha se ha presentado una variación, un aumento importante (en los casos de suicidio); hasta antes de esos años, la tasa más alta de era de adultos mayores, y ahora también es entre los jóvenes», dijo Juan Manuel Quijada, director general de los Servicios de Atención Psiquiátrica.

Diana Tejadilla, directora de Normatividad y Coordinación Institucional del Consejo Nacional de Salud Mental, informó que la tasa de suicidio en México es de 5.3 por cada 100,000 habitantes.

Las poblaciones que representan las tasas más altas de suicidio son los jóvenes de entre 20 y 24 años (9.3) y los hombres de ese rango de edad (15.1), mientras que para las personas de 15 a 29 años, el suicidio representa la segunda causa de muerte.

Según la información compartida, Jalisco, Guanajuato y Chihuahua son los que tienen el mayor número de casos de suicidio.

Los factores

Tejadilla expuso que, en colaboración con la UNAM, se ha detectado que, de las personas que han solicitado apoyo en medio de la emergencia sanitaria, 23,872 sufren violencia, 11,273 tienen problemas con sustancias, 9,955 sufren, 7,752 tienen depresión y 5,164 muestran signos de autolesión o suicidio.

De estos factores se desprende que las problemáticas principales que podrían llevar al suicidio son estrés (39%), emociones (26%), pensamientos de autolesión (14%), crisis (15%), violencia (4%) y consumo de sustancias (4%).

Modelo de prevención

El sistema de salud mental tiene un marco especial para prevenir el suicidio, con los siguientes componentes:

* Vigilancia: a partir de datos del Inegi sobre el suicidio, para mejorar los sistemas de información.
* Identificación de factores: saber cuáles son los determinantes que inciden en la decisión de una persona.
* Implementar estrategias: vinculación con otros sectores de la población y dependencias.
* Ejecución: una vez que se detectaron las estrategias, se pone en marcha un programa nacional para la prevención del suicidio.

A esta estrategia se suma la la Línea de la Vida, de la Secretaría de Salud, cuyas llamadas relacionadas con autolesiones o suicidios son de las que más se han incrementado de enero a agosto de 2020.

La Línea de la Vida (800 911 200) funciona las 24 horas del día, de lunes a viernes, y cuenta con atención especial en salud mental. También están disponibles los números de Psicología (55 5025 0855) y el de Psiquiatría y Salud Mental (55 5623 2127), ambos de la UNAM.