Consideradas complejas y monótonas, forman parte de las áreas del conocimiento: son las matemáticas, su uso contribuye a salvar vidas. La existencia humana tiene un aliado en un cálculo matemático.
Al menos dos áreas de esta ciencia han tenido, en palabras de Javier Elizondo Huerta, secretario Académico del Instituto de Matemáticas (IM) de la UNAM, un papel fundamental durante la pandemia: la estadística y el modelaje.
Gracias a su aplicación, explicó el investigador, el ritmo y la velocidad de transmisión de la COVID-19, las condiciones bajo las cuales se contagia, el periodo de incubación, incluso el estatus de infección de los pacientes asintomáticos, se conoce y detalla por esta disciplina científica.
En ocasión del Día Internacional de las Matemáticas, que se conmemorará el 14 de marzo, dejó en claro que tienen un papel fundamental durante la emergencia sanitaria.
“Hay otras áreas de la matemática en donde incluso uno puede buscar las formas de maximizar el número de gente inoculada en el menor tiempo posible, incluso dónde deben estar los centros de distribución de las vacunas; eso es algo que las matemáticas pueden hacer”, ejemplificó.
Paloma Zubieta López, Técnica académica del IM, y académica de la Facultad de Ciencias (FC), asegura que a raíz de esta emergencia por SARS-CoV-2 ha quedado evidente que las matemáticas son importantes para entender al mundo.
“Todas las informaciones que han surgido con rigor están fundamentadas por la matemática de diferentes maneras y uno de los problemas de la población desafortunadamente es que no las comprende, ni puede acceder a éstas”, dijo.
¿Aburridas?
Paloma Zubieta asegura: “nos hemos acostumbrado a verlas solo como operaciones numéricas y como algo completamente ajeno a nosotros; esto se ha generado no solo en el salón de clases, sino socialmente”.
Para la especialista “resulta difícil encontrar caminos para que se logre hacer este puente entre ciudadanos y matemáticas, lograr que cada uno de nosotros las veamos de otra manera”.
En tanto, Javier Elizondo aclaró que el problema no son las matemáticas, sino la forma en que se han enseñado. “En México seguimos enseñando las matemáticas prácticamente igual desde 1940, y es una forma algorítmica”.
Es decir, el alumno tiene que aprender ciertos pasos, repetirlos para obtenerlos, como un algoritmo que se repite; te dan una fórmula y te ponen diez ejemplos parecidos, solo cambian algunas cosas, y tienes que ver cómo puedes aplicar la fórmula.
Son un proceso de pensamiento creativo, en donde generalmente uno no sabe qué hacer, no hay un algoritmo preestablecido y tienes que empezar a investigar a través de ejemplos.
“¿Aburridas?, puede que tengan razón, porque la forma en que aprendieron matemáticas es completamente algorítmica, porque no hay un pensamiento creativo en ello, no hay proceso de investigación, de descubrimiento”.