A dos años de los sismos de 2017, la Secretaría de Cultura dio a conocer un avance de 42 por ciento en los trabajos de reconstrucción del patrimonio cultural.
Los movimientos sísmicos ocurridos el 7 y 19 de septiembre de ese año afectaron dos mil 340 inmuebles; de ellos, 325 corresponden a Puebla, 217 al Estado de México, 118 a Morelos, 91 a Tlaxcala, 79 a Oaxaca, 58 a Guerrero, 47 a Chiapas, 26 a Tabasco, 14 a Veracruz, ocho a la Ciudad de México y siete a Hidalgo.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) destacó que hasta el momento se restauraron y entregaron 990 inmuebles históricos y con el recurso necesario se intervendrán los mil 350 restantes. Refirió que de las 42 zonas arqueológicas dañadas, se han recuperado 25; en Chiapas, Guerrero y el Estado de México se restauraron 12, cuatro por cada entidad; nueve en Oaxaca, dos en Puebla y dos más en Tabasco.
Además, agregó, nueve adicionales son intervenidas (una en Chiapas, cinco en Morelos y tres en Oaxaca), y cuatro más están en estudio para su posterior atención (una en el Estado de México, una en Guerrero y dos en Hidalgo), indicó en un comunicado de la Secretaría de Cultura federal.
El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) dio a conocer que de los 52 inmuebles declarados como monumentos artísticos, la mayoría ubicados en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México, tuvieron afectaciones menores o moderadas, como el Monumento a la Revolución, el Antiguo Palacio Postal, el Banco de México, la Secretaría de Salud y la Casa de la Representación del Gobierno de Quintana Roo, los cuales fueron atendidos por sus titulares.
Respecto a los trabajos en Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca, con 175 inmuebles clasificados como monumentos históricos de gran valor patrimonial, la Secretaría de Cultura informó que la reconstrucción «ha sido lenta, pero significativa” y que la rehabilitación del Templo de San Blas Atempa es casi total.
Natalia Toledo, subsecretaria de Diversidad Cultural, y Diego Prieto Hernández, director general del INAH, constataron los avances durante una gira de trabajo por los municipios oaxaqueños de Tehuantepec y Juchitán, los más perjudicados por el temblor del 7 de septiembre de 2017. La dependencia federal informó que para la recuperación del Templo de San Blas Obispo se destinaron cuatro millones de pesos.