Las actrices Lily-Rose Depp y Laetitia Casta, de 19 y 40 años, respectivamente, han sido las encargadas de poner el toque internacional a la 66 edición del Festival de Cine de San Sebastián, presentando así en nuestro país sumás reciente película, A Faithful Man.

La hija de Johnny Depp y Vanessa Paradis ha tomado el relevo de Úrsula Corberó, Belén Cuesta o Rossy de Palma, deslumbrando sobre la alfombra roja con un atrevido vestido corto negro con de Chanel, firma de la que es imagen, llevando el logo de la maisson por todo el vestido en plateado. Una de las apuestas más divertidas de la noche.

Laetitia, por su parte, ha elegido un vestido mucho más formal y largo, en terciopelo negro y con escote barco.

Las actrices han derrochado glamour y elegancia, trayendo el estilo de Hollywood a a San Sebastián.

La película de Louis Garrel es un drama romántico, que cuenta la historia de Marianne, que deja a Abel por Paul, su mejor amigo y padre del hijo que está esperando. Ocho años después la vida del hijo de Marianne cambia radicalmente en una historia de amor y familia.

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