El Senado exhortó al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) y a sus homólogas en los 32 entidades, para que se coordinen con autoridades de los tres órdenes de gobierno, a fin de crear un programa especial para combatir el uso del lenguaje y actitudes discriminatorias en el deporte profesional, así como por parte de la afición.
Las y los senadores hicieron un llamado para establecer o promover protocolos que permitan identificar la violencia física, verbal y sus niveles de gravedad en los que se incurran, a fin de que las instituciones puedan tener elementos objetivos para aplicar las sanciones correspondientes, incluso, durante los eventos deportivos.
En el dictamen, avalado por la Asamblea el pasado 15 de diciembre, se explica que estas medidas buscan continuar con el impulso de la concientización de niñas, niños y adolescentes sobre las problemáticas de utilizar lenguaje y actitudes discriminatorias, para con ello contribuir a una cultura de paz y respeto de derechos humanos.
Coincidieron en la necesidad de que, a través de programas especiales se combata este tipo de expresiones en los deportes profesionales, se sancione a las personas que recurren a la violencia verbal y, sobre todo, se concientice a la niñez mexicana en torno a la importancia del uso de lenguaje. Lo anterior, con base en las atribuciones que otorgue el marco jurídico aplicable.
Refirieron que, además de las secretarías de Gobernación y de Educación Pública hay dependencias responsables de instrumentar acciones de concientización de la discriminación, ya que el origen de esta y de la violencia es multifactorial y por ende su implementación debe ser transversal.
En el documento se expone que, en la práctica deportiva, así como en los espectáculos y competencias del deporte amateur y profesional, se despierta una gran serie de pasiones en los seres humanos; por ello, es fundamental que la narrativa y el lenguaje que se utiliza tanto en canchas como en las gradas no incite a la violencia.
Como ejemplo, se aluden expresiones para denigrar a las mujeres u otros hombres mediante oraciones o palabras que establecen juicios de valor en el que la figura de la mujer o el género femenino son inferiores, denotan machismo y estereotipos.
En ese sentido, expusieron que en el ámbito del fútbol mexicano, el discurso de confrontación ha sido utilizado para fomentar la competencia entre los equipos deportivos, la rivalidad y disenso entre los aficionados a cada uno de ellos.