Ciudad de México, 20 Nov (El Informador).- El baile de los 41 fue la primera mediatización de la homosexualidad en México. Por primera vez, los medios hablaron sobre la homosexualidad. La película no solo vislumbra la homofobia, también el racismo y el clasismo, los cuales siguen perpetuándose en nuestro país, que llega este 19 de noviembre a 500 salas de Cinépolis en México.
La cinta es una reflexión en torno a la discriminación histórica que ha sufrido la comunidad LGBTQ+, que retoma la historia de aquella redada policial que emprendió el gobierno de Porfirio Díaz contra un baile de hombres homosexuales el 18 de noviembre de 1901. Un episodio que fue escandalizado por la prensa mexicana y que también fue inmortalizado en una viñeta de José Guadalupe Posada en la que se lee: “Los 41 maricones”.
Los actores Alfonso Herrera, Emiliano Zurita, Mabel Cadena; así como el director David Pablos charlaron con Publimetro sobre el estreno de la cinta que se estrenará este jueves, con una clasificación “C”.
“La poca información que existe de esta historia, en mi caso, fueron muy útiles ciertos libros El exilio de Carlos Tello Díaz, que hay algunos fragmentos donde dejan ver algunos esbozos de quién era Ignacio de la Torre, partiendo del hermetismo de la información, fue interesante recopilarla. En pleno 2020, se siguen cometiendo crímenes de odio en contra de homosexuales, transexuales y de todo aquello que vaya en contra del sistema patriarcal, así que hemos evolucionado poco”, dijo Alfonso Herrera, quien hace el papel de Ignacio de la Torre, esposo de Amada, hija de Porfirio Díaz.
El actor agregó, “me hizo entender a profundidad este hecho histórico que era un tema tabú, me refiero a la ignorancia que existe del evento, pero por otro lado darme cuenta lo poco que ha cambiado la sociedad, porque se mantienen las estructuras sociales que rigen el país son las mismas. Este es un gran ejercicio para ver el pasado y el presente, esta es un cuestionamiento que nos hicimos. Hace 120 años ser homosexual implicaba vivir en la clandestinidad, implicaba no vivir en libertad, probablemente en muchas de las ocasiones la muerte versus contra la cantidad de crímenes y odio que existen en el país. Han habido avances en algunas entidades federativas, pero todavía hay mucho camino por hacer”.
Para el director, David Pablos, el poder abordar tabúes le permite provocar una discusión y poner en evidencia a una sociedad.
“Más allá que es una historia que se ha mantenido al margen, no ha salido de todo a la luz, está muy presente, pero me emociona poder abordar un tabú y ponerlo sobre la mesa. Me parece hermoso ver este proceso de los hombres vistiéndose de mujer, verlos desde distintas masculinidades. Una de mis escenas favoritas de la película es Alfonso Herrera vistiéndose de mujer, me parece una escena muy intimista entrañable y es algo que para gran parte de los hombres de este país sigue siendo impensable conectar con un lado femenino, permitirse ser femenino ha sido por mucho tiempo mal visto. Veo a estos hombres vestidos de mujer, veo esta relación entre hombres es hermoso, por eso es una celebración a las relaciones amorosas y fraternales entre hombres”.
Personajes
Emiliano Zurita (Evaristo Rivas)
“Algo que me conmovió era eso que te enseña escenas hermosas, tan onírico, al mismo tiempo te va llevando a las cosas terribles de la sociedad y humanidad, eso es muy fuerte. Ver todo lo que pasa en la película y cuando termina ver esa soledad, te deja con un shock, no por enseñarte algo nuevo, sino por las situaciones reales que comparte”.
Mabel Cadena (Amada Díaz)
“Me parece importante dejar un antecedente a través de El baile de los 41 que permita evolucionar a la mente humana hacia un mejor futuro, donde ya no tenga que levantarse la voz por decidir a quién querer, sin etiquetas o géneros. La cinta me parece una enorme invitación a la sociedad para ir a incomodarse y que se atrevan a ver la película, que evoca el pasado con una reflexión al presente”.
Contra la clasificación «C» de la cinta
“Es inmerecida la clasificación ‘C’, me sorprende y no, es más censurable ver hombres desnudos, relaciones sexuales entre hombres que ver violencia o tortura que está más normalizada que ver la diversidad en pantalla”, señaló David Pablos, el director de El baile de los 41.