París, 27 Jul (Excélsior).- Más allá de su omnipresente actor y productor, Tom Cruise, los actores de la sexta entrega de Misión Imposible, Fallout, que en México ya está en la cartelera, toman mayor protagonismo y defienden la cinta «más oscura y emotiva» de la saga de acción que desvelará las debilidades de Ethan Hunt.
El agente secreto más conocido de las últimas décadas vuelve a la gran pantalla en una cinta rodada a caballo entre París, Londres y Nueva Zelanda, con escenas en las que Cruise se jugó el físico.
«Ver a Cruise caer por la cuerda de un helicóptero te puede provocar un paro cardiaco», contó en entrevista Simon Pegg, que interpreta a Benji Dunn, miembro de la Fuerza de Misiones Imposibles, algo así como el Sancho Panza de Ethan Hunt.
El británico ve esta película como «el momento en el que Hunt vuelve la vista atrás preguntándose si merecía la pena, lo que hizo bien y lo que hizo mal y si no ha causado más problemas a la gente que quería».
En su tercera aparición en la saga, Pegg no asumió muchos riesgos físicos, aunque recordó como una «gran experiencia» la oportunidad de conducir por el Sena en una de las secuencias más impresionantes de la cinta.
Una nueva incorporación fue la de la neoyorquina Angela Bassett, en la piel de la directora de la CIA, que también se libró de las escenas de mayor vértigo.
«Lo mejor fue poder viajar por todo el mundo dentro de estos increíbles escenarios de acción, aunque yo no tuviera demasiada, pero bueno, teniendo a Tom Cruise cerca, ¿por qué debería yo saltar de un avión?», bromeó la artista, que se mostró dispuesta a «pegar patadas» en la próxima entrega, si vuelven a contar con ella.
Junto a Bassett, regresan a la pantalla la sueca Rebecca Ferguson, en el papel de Ilsa Faust, y la estadunidense Michelle Monaghan, que interpreta a Julia Meade-Hunt, siguiendo la voluntad del director, Christopher McQuarrie, y de Tom Cruise de dar más fuerza a los personajes femeninos.
«Ver a una mujer como yo, de una cierta edad, en una posición de poder y experiencia manda un mensaje muy poderoso y maravilloso», opinó Bassett en una reciente entrevista en París.
Otra incorporación fue la del británico Henry Cavill, conocido por su papel de Superman en El Hombre de Acero, convertido ahora en un nuevo rival para Hunt.
«Interpretar un personaje como August Walker fue muy emocionante. Todos tenemos esa parte de la psique que no quiere hacer lo correcto y fue divertido indagar ese lado, jugar con este personaje en mi cabeza y sacarlo al mundo real. Fue divertido, además tenía que llevar bigote», comentó Cavill entre risas.
Todos ellos se dijeron dispuestos a participar en una nueva entrega, idea que no se descarta pues el propio Cruise dijo durante el estreno de la película que seguirá hasta que el cuerpo aguante, aunque eso cause más de un susto al equipo.
«Lo único que pienso es en que Cruise llegue seguro a casa al final del día», dijo McQuarrie, único director de la saga que ha repetido en el puesto ya que dirigió también la anterior, Rogue Nation.
Tras 20 años colaborando con el actor, McQuarrie aseguró que crear películas de acción con él es su trabajo «más duro» pero también el «más divertido».