El técnico del Manchester City, Pep Guardiola, se quejó por la intensa actividad en la Liga Premier inglesa durante los últimos días de diciembre y los primeros de enero, y advirtió que un calendario tan saturado va a «matar» a los jugadores.
El City fue uno de los clubes que debieron jugar cuatro partidos en 11 días que abarcaron las festividades de Navidad y Año Nuevo. Sus últimos dos compromisos, una visita al Crystal Palace y un cotejo de local ante Watford, se llevaron a cabo el domingo y martes, respectivamente.
«Lo que hemos visto, lo que todo mundo ve en las últimas semanas es cuántas lesiones sufren los jugadores», comentó Guardiola.
«Los vamos a matar. La federación, sin importar quiénes sean sus jefes, debe reflexionar. Esto no es normal».
La gota que habría derramado el vaso para el estratega español habría sido la imagen del lateral derecho Kyle Walker, quien se llevó una mano a una ingle en los últimos minutos del partido del martes, una victoria por 3-1 sobre Watford. Guardiola dijo que Walker «tendría un problemita».
El City había perdido ya al delantero Gabriel Jesus, quien se lastimó un ligamento el domingo, en el empate sin goles frente al Palace. Se estima que el brasileño se perderá de cuatro a seis semanas de actividad.
«Sé que el espectáculo debe seguir, y continuará, sin importar los jugadores que tengamos», afirmó Guardiola.
«Pero acá en Inglaterra, no protegen a los futbolistas. Ése es un grave error. Hay que hacerlo por la calidad, no por la cantidad de los partidos. Jugad cada tres, cuatro o cinco días, pero no cada dos días… Mirad cuántos jugadores tienen lesiones musculares en este periodo. Pero no importa, el show debe seguir y por eso habrá futbolistas que no estén en condiciones de jugar».