Nueva York, 2 Jun (Quién).- Mariah Carey no ha dudado en defenderse con vehemencia de las acusaciones que le ha dirigido su propio hermano, Morgan Carey, a través de una demanda por difamación y a cuenta del retrato tan poco favorecedor que hace la diva de él en su exitoso libro autobiográfico ‘The Meaning of Mariah Carey’.

En la mencionada obra, la diva del pop ahonda en su difícil infancia en un hogar desestructurado y marcado por la violencia tanto física como verbal.

En lo que respecta a su citado hermano mayor, la artista destaca el miedo constante al que se veía sometida debido al carácter errático y conflictivo de este, quien llegó a ser internado en una especie de reformatorio tras una traumática pelea con su padre: todo ello según se desprende de la versión de los hechos que ofrece Mariah en su ‘best seller’.

La respuesta de Morgan a este capítulo concreto de la infancia y adolescencia de la estrella se materializó directamente en los tribunales hace unos meses, por medio de un recurso legal que perseguía una indemnización económica y, de forma más general, la restitución de su maltrecho honor y de su dignidad.

Sin embargo, los abogados de Mariah Carey han facilitado ahora a un juez de Nueva York, como informa el diario The New York Post, una nueva argumentación legal. Lo anterior defiende el testimonio de la artista como un asunto de interés público y además de utilidad social, ya que este representa, en su opinión, una historia de «superación personal ante las adversidades» que debe estar en manos de la ciudadanía.