Londres, 30 Sep (¡Hola!).- Mientras en Los Ángeles, Meghan Markle se entrega a sus nuevos proyectos con varias apariciones en pro de las causas que apoya, de vuelta en Reino Unido, la Duquesa de Sussex pelea una férrea batalla contra los tabloides para proteger su privacidad.
La esposa del Príncipe Harry emprendió desde hace unos meses un litigio contra Mail on Sunday, Mail Online y la empresa propietaria de las publicaciones, Associated Newspapers, por la publicación de una carta personal que en su momento Meghan escribió a su padre, Thomas Markle.
En una audiencia más de este juicio, la Corte ha vuelto a fallar en su contra, al permitir a la defensa agregar en la documentación, la supuesta colaboración de Meghan -directa o indirectamente- en la publicación de la biografía Finding Freedom, algo que los Duques han negado desde el primer momento.
En la audiencia de la semana pasada, la defensa solicitó a la High Court el agregar en los documentos del juicio la supuesta colaboración de Meghan en la publicación de la biografía Finding Freedom: Harry and Meghan and the Making of a Modern Royal Family.
Argumentando que la Duquesa: «causó o permitió que información fuera provista directa o indirectamente, y cooperó con los autores, incluyendo permitiéndoles dar información sobre la carta”.
Sobre esto, agregaron: “Si C (acusadora) proveyó de cooperación extensa a los autores y permitió un detallado recuento de su vida privada, relaciones, pensamientos y sentimientos para que fueran publicados, incluyendo referencias a su relación y comunicación con su padre, es difícil ver cómo puede quejarse de que la carta no debió haber sido publicada porque ‘contiene los más profundos y privados pensamientos y sentimientos de la acusante’”.
Ante estos argumentos, los representantes legales de Meghan negaron rotundamente que esto fuera cierto e incluso, su abogada leyó un la Corte una lista de inconsistencias del libro con la realidad. Explicó que los Duques no habían manifestado esto antes, pues se consideraba que los autores se habían dado algunas licencias literarias y algunos puntos eran producto de su imaginación.
La Juez Francesca Kaye aceptó que el grupo de medios hiciera la adición a su defensa para agregar las anotaciones sobre Finding Freedom. Esto significa que el libro ha sido agregado como evidencia y que en algún punto la Duquesa podría ser llamada a declarar bajo juramento.
La juez dijo que esta deferencia no implicaba ‘nuevas defensas’, sino que simplemente añadía ‘particulares extra’ al caso. Agregó que Meghan ‘conoce el caso que tiene que enfrentar’ y que ‘no hay sugerencia de que ella, de hecho, no pueda hacerlo’.
Justin Rushbrooke, uno de los representantes legales de la Duquesa, pidió permiso para apelar esta autorización, diciendo que había una ‘improbabilidad inherente’ de que Meghan hubiera cooperado con los autores de la biografía y que se podía demostrar ‘simplemente comparando lo que los defensores decían en sus propios artículos con lo que se decía en el libro sobre la carta’.
La juez negó esta apelación, pero los abogados de Meghan todavía podrían llevar su petición a la Corte de Apelaciones. Éste es el segundo fallo en contra de la Duquesa en este caso, en el que únicamente se ha anotado un triunfo al evitar que los nombres de sus amigas, que dieron una entrevista a People para dar detalles personales de su vida, sean publicados.
En este caso todavía faltan muchas audiencias y hasta el momento es incierto por quién se inclinarán las autoridades. La Duquesa denunció a los tabloides por la publicación de una carta persona que ella escribió a su padre y que Thomas Markle compartió con ellos.