Los Ángeles, 30 Oct (Cine Premiere).- Guillermo del Toro entiende que nuestras listas individuales de mejores películas de la historia son, en cierta forma, una cápsula del tiempo. Un ejercicio que siempre resulta complejo y doloroso, pero nos recuerda quienes éramos en determinado punto de nuestra vida cinéfila.
En 2022, el responsable por El laberinto del fauno (2006), La forma del agua (2017) o Pinocho (2022) participó en la encuesta de mejores películas jamás realizadas de la revista Sight & Sound. En ella, el British Film Institute invita a múltiples cineastas internacionales cada década para generar su propia lista.
“Los Top Ten son imposibles, sí, pero son reveladores. Te dicen dónde estás en ese preciso momento de tu vida cinematográfica. Mientras compilaba esta lista con solemne compromiso, muchos títulos alternativos iban y venían: Avaricia, Amanecer, Grandes esperanzas, Niños de los hombres, El cielo y el infierno, El maquinista de La General, Lo que el cielo nos da, Mad Max 2, Cantando bajo la lluvia, Los ojos sin rostro, Fenómenos, Garras humanas, Birdman, La perra, Los amigos de Eddie Coyle, etc, etc, y por supuesto esta lista no le importa a nadie más que a mí”, escribió Del Toro como observación adicional. “Dicho esto, decidí probarlo una vez, anotarlo todo y enumerar un título alternativo para el trabajo de cada director. Incluso esto resultó difícil, pero aquí están. Pregúntame nuevamente el viernes y te doy una lista diferente”.
A continuación, les compartimos las 10 películas favoritas de Guillermo del Toro. ¿Cuántas has visto?
Luces de la ciudad (Dir. Charles Chaplin, 1931)
Chaplin en su cúspide artística. Un vagabundo se enamora de una chica ciega y hace todo lo que está en sus manos para poder ayudarla con sus problemas económicos. Un clásico que combina con elegancia humor, ternura y anhelo, resistiéndose aún a la invasión del cine sonoro. Encabeza la lista el Top 10 del Instituto Estadounidense del Cine (AFI, en inglés) en el género de la comedia romántica.
Frankenstein (Dir. James Whale, 1931)
No es ningún secreto el amor y la influencia que Frankenstein ha tenido en la carrera del cineasta tapatío. Basada en la novela corta de Mary Shelley, Boris Karloff da vida aquí al monstruo más célebre de la cultura popular, uno engendrado por un científico a partir de partes robadas de cadáveres. Próximamente Guillermo del Toro por fin podrá concretar su propia adaptación con Oscar Issac y Andrew Garfield.
Soberbia (Dir. Orson Welles, 1942)
Después de Ciudadano Kane, Orson Wells reiteró que era un talento generacional con una adaptación de The Magnificent Ambersons, la novela ganadora del Pulitzer de Booth Tarkington. Crónica de la inexorable decadencia de una familia acomodada de Indianápolis a principios del siglo XX. Al igual que su ópera prima, Soberbia es considerada una de las grandes películas de todos los tiempos.
La sombra de una duda (Dir. Alfred Hitchcock, 1943)
Dentro de su prolífica y legendaria filmografía, ésta era la película favorita de Alfred Hitchcock. La llegada del tío Charlie a la casa de sus familiares en un pueblo de Santa Rosa, en el que nunca pasa nada, es la base de un relato excepcionalmente macabro y con tremendas dosis de comedia negra. Aquí un magnífico Joseph Cotten encarna a un seductor criminal al que la justicia le va pisando los talones.
Nazarín (Dir. Luis Buñuel, 1959)
Ganadora del Premio Internacional en Cannes en 1959, Nazarín sigue a un cura humilde en el México rural de principios del siglo XX, quien solo desea hacer el bien. Sin embargo, sus acciones, determinadas por su concepto de la caridad cristiana, solo provocan más conflictos. Una inteligente y mordaz adaptación de la novela de Benito Pérez Galdós, por parte de uno de los grandes cineastas de la historia.
Barry Lyndon (Dir. Stanley Kubrick, 1975)
Con una dirección, fotografía, diseño de arte, vestuario y banda sonora impecables, esta magistral obra de Stanley Kubrick relata las peripecias del desaprensivo estafador irlandés Barry Lyndon. Concretamente, su ascenso y caída en la sociedad inglesa en medio de la Guerra de los Siete Años en el Siglo XVIII. Un filme que también es consentido y ha inspirado a cineastas de la talla de Martin Scorsese o Ridley Scott.
8½ (Dir. Federico Fellini, 1963)
¿En dónde comienza la autobiografía y termina la fantasía? Atrapado en una profunda crisis creativa mientras prepara su próxima película, el director Guido Anselmi se refugia en sus recuerdos y ensoñaciones en busca de una musa. Con elementos de metaficción que se mezclan con el surrealismo, 8½ es el más icónico de los esfuerzos por capturar la inspiración fílmica. Una obra inmortal de Fellini.
Encuentros cercanos del tercer tipo (Dir. Steven Spielberg, 1977)
Obligatorio dejarse abducir por este clásico de Steven Spielberg. Cuenta la historia de Roy Neary, un trabajador de una compañía eléctrica en Indiana, cuya vida cambia al observar misteriosos objetos voladores en el cielo. Al mismo tiempo, científicos internacionales comienzan a investigar también dichas apariciones OVNI, junto con otros extraños sucesos que están sucedido por todo el mundo.
Buenos muchachos (Dir. Martin Scorsese, 1990)
Considerada por muchos críticos y cinéfilos como la obra definitiva de Scorsese en lo que concierne a sus épicos dramáticas criminales. Basada en el libro de no ficción Wiseguy, la película nos sumerge de lleno en el intrigante, cautivador y violento submundo de la mafia neoyorkina de la segunda mitad del siglo XX, con las ya míticas interpretaciones de Ray Liotta, Robert de Niro y Joe Pesci.
Sin lugar para los débiles (Dir. Joel & Ethan Coen, 2007)
Un majestoso neo-western de los hermanos Coen inspirado por la novela No Country for Old Men, de Cormac McCarthy. Este multipremiado drama nos muestra los trágicos efectos del cruce de los caminos de tres hombres en el desértico paisaje del oeste de Texas en los años 80: un sheriff, un asesino a sueldo y un veterano de Vietnam que se topa con una fortuna que no le pertenece.