El diputado declaró que la reforma de 2013 se implementó sin planeación y representa un atraco hasta para los inversionistas y empresas privadas.

En el marco del foro 10 de parlamento abierto para el análisis de la reforma eléctrica, el diputado Ignacio Mier Velazco, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, confió que estos ejercicios de diálogo respetuoso den la pauta para comprender la necesidad que tiene el país de una reforma eléctrica como la presentada por el Ejecutivo, en la que se incluye la participación de la iniciativa privada y de la que se beneficiará incluso ese sector.

Durante el encuentro presencial con integrantes de la Junta de Coordinación Política, funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad y representantes del sector privado, Mier Velazco expresó que las y los legisladores están obligados a exponer los alcances de la reforma y, especialmente, aclarar que ésta incluye la participación del sector privado.

Señaló que, a través de la reforma de 2013, “lo que hicieron fue un verdadero atraco a todos, sin planeación, que afecta hasta a los inversionistas y empresas privadas, porque nunca les dijeron cuántos permisos se iban a generar ni nunca les dijeron cuál iba a ser la demanda esperada de energía en el país”.

Explicó que México tiene, en la actualidad, una demanda cercana a los 46 mil megawatts, y una capacidad de generación de 89 mil, al tiempo que se estima un crecimiento en la demanda de hasta 70 mil megawatts, dentro de 6 años.

Expresó que, si los permisos que se otorgaron son por el orden de los 130 mil, “entonces va a ser un tronadero de las propias empresas privadas y por eso deben estar alerta ellos”.

Sostuvo que las consecuencias de la reforma de 2013 obligaron a realizar el actual análisis a la propuesta del Ejecutivo federal, que rompe con el modelo histórico que prioriza solo a un sector.

Señaló que una tienda de conveniencia que no es beneficiada por el sistema tarifario inequitativo e ineficiente establecido por la reforma de 2013, tiene que competir con otro establecimiento que sí se favorece de este esquema, “y paga en promedio, por el uso de un mismo número de refrigeradores, 19 mil pesos por la distribución, la transmisión y la capacidad de la energía eléctrica”.

En contraste, su competencia paga por la distribución y por transmisión, 322 pesos; y 88 pesos por la transmisión, es decir, “hay una diferencia de nada más 18 mil pesos, entre una tienda de las mismas características”.