Morena y sus aliados aprobaron la centralización de los recursos de servicios públicos de salud que, hasta ahora administraban las 32 entidades federativas, tal como establece la Constitución Política, denunció el diputado Marcelino Castañeda Navarrete (PRD).

“Compañeras y compañeros del oficialismo, con la salud no se juega, dejar sin servicios médicos a las y a los mexicanos es un acto miserable”, señaló en el marco de una reunión extraordinaria convocada por las Comisiones Unidas de Salud y de Hacienda y Crédito Público para aprobar el dictamen que busca consolidar la federalización del Sistema de Salud para el Bienestar.

En un comunicado, Castañeda Navarrete aseguró que “las necesidades de recursos y la estrategia para obtenerlos del fondo del gasto federalizado tienen como objetivo debilitar la autonomía de los gobiernos subnacionales”.

Recordó que la problemática de salud del desabasto de medicamentos y de las más de 50 millones de personas sin acceso a la salud, «es producto de la improvisación y ocurrencias que generaron el desmantelamiento de los mecanismos existentes, sin previa construcción de un modelo adecuado”.

Recordó que el modelo de salud de este gobierno se puso en práctica con el extinto Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi); «diversos estados del oficialismo firmaron los convenios de descentralización de los servicios de salud, sin que esto significara alguna mejora en los servicios prestados”.

Incluso, detalló que en la Ciudad de México se tienen problemas laborales causados por la descentralización, donde los médicos del sistema de salud de la capital del país se vieron afectados por las decisiones tomadas.

Finalmente, el legislador expuso que fue evidente que la desaparición del Seguro Popular, sin contar con una estrategia que lo supliera a fin de atender a quienes no gozan de los servicios sanitarios a los que tienen derecho, «fue la peor aberración de este gobierno». (EGV)

Foto: Cámara de Diputados