Luego de los trámites de ley, los cuerpos de las tres niñas que fueron privadas de la vida por su propia madre, dejaron las instalaciones del Servicio Médico Forense para ser entregados a sus familiares.

Las menores de 2, 5 y 7 años de edad presuntamente fueron asesinadas por su propia progenitora, una mujer de 27 años, quien padecía depresión y recién había llegado de Delicias, Chihuahua.

Una fuente allegada a la investigación reveló que continúan las indagatorias para establecer los hechos, registrados la madrugada del viernes en un domicilio del Fraccionamiento Paseo Santa Isabel, en el ayuntamiento de Salinas Victoria.

Desde el mismo día de los sucesos trascendió que Ana Laura habría dejado un mensaje póstumo, lo que permitió robustecer la hipótesis de que la joven degolló a las niñas y luego se suicidó.

Las menores fueron identificadas como Mía Muriel, de apenas 2 años; Laura Zoé, de 5 y Alex Camila, de 7.

De acuerdo con el Vicefiscal, Luis Enrique Orozco la madre de familia y las pequeñas había sufrido de violencia intrafamiliar por parte del padre de familia por lo que llegaron a Monterrey, en donde fueron acogidas por una familiar.

Se dijo que la joven madre buscaba un mejor entorno para ella y sus hijas. Hasta estaba decidida a buscar trabajo e inscribir a las mayores en la escuela.

Una hermana de la mujer fue quien localizó los cuerpos en una de las recamaras del domicilio. Al momento en que arribó siguió un resto de sangre y se percató de la escena.

Los vecinos del lugar indicaron que no conocían a Ana Laura porque tenía poco de haber llegado al sector, pero estaban consternados por la tragedia.

Hasta el momento, no ha sido establecido si la joven recibía atención para la depresión que padecía, sin embargo se dijo que estaba muy afectada por el maltrato que recibió de su ex pareja.

El crimen ocasionó una intensa movilización policíaca y también conmocionó a los habitantes de Nuevo León por la muerte de las tres inocentes.

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