La Revolución Mexicana fue uno de los acontecimientos más importantes de la historia de México del siglo XX. Inició en 1910, después de varias décadas de dictadura que fomentaron el descontento en distintos sectores de la población, desde los campesinos hasta las élites cercanas a Porfirio Díaz.

Con el objetivo de analizar y reflexionar sobre esta etapa de la vida nacional, destacados investigadores participarán en el Cuarto Simposio Génesis y Desarrollo de la Revolución Mexicana, quienes abordarán el tema desde diferentes aspectos: como un juego de alianzas y rupturas irreconciliables que ayudan a consolidar el poder posrevolucionario, como un evento que produce cambios, pero mantiene continuidades del régimen anterior, y como un factor educativo que fomenta, a través del cine, las diferentes visiones de la Revolución Mexicana.

La actividad académica virtual, organizada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), a través del Museo Regional de Puebla, se realizará los días 17, 18 y 19 de noviembre, a las 17:00 horas, a través de la página en Facebook del recinto museístico, como parte de la campaña “Contigo en la Distancia”, de la Secretaría de Cultura.

La primera conferencia magistral, La Revolución Mexicana: entre alianzas y rupturas, será impartida el 17 de noviembre, por la profesora investigadora de El Colegio de Jalisco, Laura Alarcón Menchaca, quien analizará el proceso revolucionario a través de las alianzas y rupturas entre grupos protagonistas o entre líderes revolucionarios, y cómo estas apoyaron en la consolidación del poder hegemónico posrevolucionario.

En los orígenes de la Revolución, las alianzas fueron de las minorías selectas, del grupo de los científicos y de las élites locales representadas por Bernardo Reyes; avanzado el proceso revolucionario, la ruptura se suscita entre constitucionalistas y convencionistas y, casi al final, entre los constitucionalistas triunfantes la alianza interna, cuando Venustiano Carranza, Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles aún tenían un objetivo común.

La siguiente ponencia, Enamoradas de armas tomar: las soldaderas y su representación cinematográfica en la época de oro del cine mexicano, programada para 18 de noviembre, estará a cargo de la investigadora del Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México, Evelia Reyes Díaz.

La producción cinematográfica en esa época fue una industria apoyada por el Estado posrevolucionario, interesado en fomentar su propia visión de la Revolución. Sin embargo, al final de ese periodo surge una visión independiente, más desolada, de la lucha revolucionaria.

En estas representaciones la imagen de la mujer tuvo un papel importante, así, se pasó de la conquista de la mujer propietaria, heredera y tradicional, al secuestro y violación de la compañera de clase. De enamorada a soldadera son los dos imaginarios que abordará la investigadora, a partir de dos películas clave: Enamorada (1946) y La Soldadera (1967), las cuales dan cuenta de los cambios y continuidades de estas dos visiones, mismas que responden a un momento historiográfico y de comprensión popular de la Revolución Mexicana.

La Revolución Mexicana: Alianzas y continuidades es el título de la tercera conferencia, la cual impartirá, el 19 de noviembre, el director de Museos del Centro INAH Puebla, Raúl Nivón Ramírez, quien abordará el movimiento revolucionario como una representación de momentos históricos que marcan un antes y un después en las sociedades, entendiéndose como un cambio radical en las estructuras socioculturales.

El concepto mismo de Revolución también tiene cargas discursivas e ideológicas, en las que es posible advertir que las llamadas revoluciones traen consigo cambios, pero también presentan continuidades sobre los periodos que las preceden. En esta conferencia, el ponente hará una reflexión conceptual del término, y sobre cuáles son las rupturas y las continuidades del proceso revolucionario de 1910 a 1920.