De acuerdo con información de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, el número de museos en el mundo pasó de 22 mil en 1975, a 95 mil en 2021.

En el caso de México, de los mil 789 que hay 130 son universitarios y 27 están a cargo de la Universidad Nacional Autónoma de México; entre ellos, el Museo de Geología, uno de los más antiguos del país.

Para la directora del Museo UNAM Hoy, del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación, Claudia de la Garza Gálvez, los recintos son espacios que sirven como muestra o repositorios; también para la reflexión sobre el pasado, proyectar un futuro, imaginar, detonar ideas, entrar en diálogo con personas, conocer historias y objetos.

Aunado a la emergencia sanitaria, en los últimos años se han transformado; sin embargo, no pueden ser sustituidos por lugares en redes sociales digitales, enfatiza la historiadora del arte y doctora en ciencias sociales.

“Continúan y seguirán siendo lugares relevantes como un espacio físico en donde podemos encontrarnos, conocer objetos y obras de arte, además de percibir otras épocas; los mismos recintos en sí, en su arquitectura e historia, forman parte de esto”.

Lo anterior dependerá de cómo los gestionemos y abramos, y sugerir a la gente que se apropie de ellos. Me parece que estar en el museo, poder conversar, vernos cara a cara y pensar desde esos espacios, es insustituible.

Por supuesto que se han logrado iniciativas cautivantes digitalmente, que nos han acercado a públicos que jamás hubiéramos imaginado, que ahora son nuestros visitantes asiduos y que, probablemente, están del otro lado del planeta. Considero que estar en el museo, interactuar con quienes formamos parte de él, no solo con el espacio, la arquitectura y los objetos, sino con quienes lo construimos día a día, no se puede reemplazar; lo constatamos todos los días, expresa la universitaria.

Sin barreras

La también curadora -quien ha desarrollado exposiciones a nivel nacional e internacional con temáticas sociales en Memoria y Tolerancia, Casa de la Memoria Indómita, MUCA, Shanghai Art Museum, Bunkamura Museum en Tokio, Pinacothèque de Paris y el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza en Madrid, entre otros-, refiere a propósito del Día Internacional de los Museos que la celebración “nos permite reflexionar sobre ese poder que tienen y mirar hacia dónde lo debemos proyectar”.

La efeméride se celebra el 18 de mayo; es un evento organizado por el Consejo Internacional de Museos a partir de 1977 para concientizar que “son un importante medio de intercambio, enriquecimiento de las culturas y de desarrollo del entendimiento mutuo, la cooperación y la paz entre los pueblos”.

Para la experta es complejo establecer una definición última, cerrada y puntual de lo que son, porque eso provocaría “ponernos barreras a nosotros mismos”.

Y añade: “hablamos también de museos sin muros y museos digitales pensados para las redes, u otros que hablaban desde una comunidad que se convertía en museo para no solo narrar su pasado y dar cuenta de este, sino para imaginar su futuro entre todos en la comunidad”.

Por ejemplo, recuerda, en Perú hay uno que es un camino, el cual fue una ruta transitada desde los incas hasta las comunidades contemporáneas.

La UNAM en la historia

Cuando se trata de una universidad, como la UNAM, con esa riqueza, historia y diversidad es más que justificado que exista un espacio alusivo a esta, considera De la Garza en referencia al Museo UNAM Hoy, el cual se localiza en el Centro Histórico de la Ciudad de México (calle Moneda número 2, entre la Catedral Metropolitana y Palacio Nacional).

“Es un homenaje a la Universidad Nacional. Es una labor honrosa trabajar ahí y conocer personas distintas. Buscamos mostrar diversos ámbitos del desarrollo universitario, ahora tenemos una exposición sobre Matemáticas, pero también sobre la labor de la Universidad durante la pandemia”, agrega.

Recordar el nacimiento del Barrio Universitario, es pensar en el recinto donde nos encontramos, nos lleva a analizar el papel de la institución educativa en la historia de nuestro país; la calle de Moneda donde nos ubicamos, es una de las arterias con más historia en América.

“En este edificio inició sus funciones la Real Universidad de México, a partir de la Cédula Real que expide Felipe II en 1551, y ahí empieza a funcionar en 1553. Desde entonces se reconoce (en disputa con la Universidad de Lima), como la primera universidad de América en funciones; estuvo aquí durante el siglo XVI, y ahora es un museo”, enfatiza.

Cabe destacar que la Universidad Nacional también cuenta con el Museo Universitario de Ciencias y Arte (MUCA); el de la Academia de San Carlos; del Antiguo Colegio de San Ildefonso; Casa del Lago Juan José Arreola; el Centro Cultural Universitario Tlatelolco; Museo Universitario del Chopo; Museo de las Constituciones; y Museo de la Luz, entre otros.