Es necesario visibilizar a todas las identidades de género para que sean sujetas de derechos, a fin de eliminar las fobias y violencias dirigidas a las personas LGBTIQ+, afirmó la psicoterapeuta Akiko Bonilla, de ADIL México.
Lo anterior, durante su conferencia “LGBTIQ+ fobias y violencia de género”, que forma parte de las actividades de la “Campaña por los derechos Arcoíris #SéTuMisme”, que tienen lugar en las instalaciones del recinto legislativo de San Lázaro, y es organizado por la diputada Salma Luévano Luna, presidenta de la Comisión de Diversidad.
Durante su ponencia, Akiko Bonilla enfatizó en la importancia de educar a la sociedad, así como a las personas en espacios de toma de decisiones, sobre el reconocimiento de las personas LGBTIQ+, a fin de cuestionar los estereotipos de género arraigados en la población.
Explicó que la construcción social de las identidades de género normadas sostiene desequilibrios de poder entre hombre y mujeres. Esto perpetua estereotipos y roles que mantienen el terreno fértil para la violencia, y ésta es una manifestación y consecuencia de la inequidad.
“Hay que hablar de esto para construir sociedades libres de todas las formas de violencia y discriminación, porque ningún ser humano tendría que vivir, de ninguna manera, violencia y discriminación”, aseguró.
Destacó la importancia de promover la empatía en las familias, ya que tener una identidad de género no normativa produce mucho rechazo en el núcleo familiar, más que las orientaciones sexuales.
“Dentro de la discriminación que han percibido las personas LGBTIQ+ que viven este rechazo son las que tienen una identidad no normativa, por ejemplo, las personas trans y bisexuales”.
Esta aversión causa estragos en la salud mental de esta población, “porque casi siempre las heridas y los procesos ansioso depresivos, la ideación e intento suicida, en consumo de sustancias y las conductas sexuales de riesgo, se forman por la LGBTIQ+ fobia u odio”, abundó.
Parte de los pendientes en la materia, además de fortalecer a las personas LGBT+, es limpiar el entorno de odio que las rodea, porque el hecho de que haya mucha gente de esta comunidad con estos problemas “no es culpa de ello, ellas y elles, es responsabilidad de toda la sociedad”, subrayó.
Desafíos en el ámbito laboral para las personas trans
Por otro lado, Queen Victoria Ortega, activista y consultora de diversas organizaciones subrayó que existen desafíos estructurales en el sistema laboral para esta comunidad, ya que se ha pensado que las persona trans son deficientes y no pueden aportar a las empresas y a la sociedad; además de que las leyes en esta materia no sean eficaces y funcionales.
Refirió que muchas veces las personas de este sector llegan a tener un salario más bajo o hasta perder su empleo simplemente por ser trans y señaló las acciones discriminatorias y microagresiones que persisten, “las estructuras no perdonan, no tiene espacios aún para las personas trans y eso genera también pérdidas económicas para las empresas”.
En ese sentido, Queen Victoria señaló que es necesario que se tengan en los lugares de trabajo esas conversaciones “incómodas” sobre cómo cambiar los sistemas y estructuras y generar estadísticas, pues no hay muchas.
Además, tener una coordinación nacional de empleadores y personas trans no binarias que buscan empleo, brindar capacitaciones certificadas y tomar acción, involucrarse a nivel personal con esta comunidad y ser mentores y abogar por estas personas.
“Las personas trans son muy calificadas, simplemente es buen negocio para las empresas vincularse con estas personas”, comentó la también reina de la Corte Real y presidenta de FLUX, dos redes internacionales dedicadas a dar visibilidad a la comunidad trans y no conformes con el género.
Diana Feliz Oliva, activista y directora asociada de Asuntos Públicos para México y América Latina en Gilead Sciences reconoció que se ha avanzado bastante en los derechos de las personas trans y no binarias, pero aún hay muchos desafíos en el campo laboral para esta comunidad, especialmente cuando ya son empleadas de alguna empresa o institución.
“No hay herramientas ni los recursos para las personas trans y no binarias cuando ya eres una empleada, no dan ese entrenamiento para desarrollar y sostener tu carrera, cuando son personas educadas y calificadas. Necesitamos crear los espacios y herramientas nosotras mismas para lograr nuestra metas y sueños”, asentó.
Foto: Cámara de Diputados