Un nuevo Congreso de Estados Unidos se reunió el domingo en medio de una atmósfera de incertidumbre política, ya que el control del Senado aún se desconoce, y una mayoría demócrata más reducida en la Cámara de Representantes.

La Cámara de Representantes comenzó a votar sobre la reelección de la congresista demócrata por California Nancy Pelosi como presidenta, algo que se ve más desafiante después de que los demócratas perdieron 11 escaños en las elecciones de noviembre para obtener una mayoría más estrecha de 222-212.

Se espera que la votación tome horas debido a las restricciones por el Covid-19.

El Senado sigue siendo republicano antes de dos balotajes en Georgia el martes, lo que da a sus miembros una plataforma para sacar nuevamente a relucir las afirmaciones infundadas del presidente Donald Trump de que su derrota ante el presidente electo Joe Biden fue resultado de un fraude.

Varias revisiones de votos estatales y federales no han encontrado evidencia sobre el fraude generalizado que afirma Trump, pero algunos senadores republicanos y miembros de la Cámara baja planean impugnar el resultado de las elección cuando el Congreso la certifique el miércoles.

Un intento republicano liderado por el senador Ted Cruz para hacer una auditoría de emergencia de 10 días de los resultados de las elecciones en estados en disputa generó críticas el domingo del senador republicano Lindsey Graham, un acérrimo aliado de Trump.

“Parece ser más una evasión política que un remedio efectivo”, dijo Graham en un comunicado. “Escucharé atentamente. Pero tienen un listón alto que superar”.

Un equilibrio de poder más estrecho en ambas cámaras este año también podría alentar a los moderados de cada partido a flexibilizar sus posturas políticas, especialmente después de que Trump deje la Casa Blanca el 20 de enero y que Biden, quien se presentó como centrista, asuma el cargo.

Pero tanto en la Cámara baja como en el Senado intentaron mostrarse optimistas a pesar de los crecientes desafíos.

“Desde la división política hasta una pandemia mortal, y adversarios en todo el mundo, los obstáculos que tenemos ante nosotros son muchos y graves”, dijo el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, ante el pleno de la Cámara alta.

“Pero también hay muchas razones para la esperanza”, agregó el republicano por Kentucky, citando el lanzamiento en curso de la vacuna contra el coronavirus. “Yo diría que 2021 ya parece brillante”.

El líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, Steny Hoyer, el segundo demócrata en rango de la Cámara, también dijo en un comunicado que espera que el nuevo Congreso “pase la página” sobre la división partidista “y comience un nuevo capítulo de cooperación entre demócratas y republicanos”.

Una mayoría demócrata más pequeña y la pandemia de coronavirus, que aún está desatada, podrían hacer que la reelección como presidenta sea más complicada para Pelosi, la única mujer que ha tenido el cargo. Pero Pelosi y sus asesores confían que tendrá éxito.

Diez de los 15 demócratas que se opusieron a la candidatura de Pelosi a la presidencia hace dos años están presentes en el nuevo Congreso, y algunos progresistas recién elegidos, como Jamaal Bowman y Cori Bush, se negaron recientemente a decir si la respaldarán.