Londres, 5 Feb (Publimetro).- Nyakim Gatwech es conocida en el mundo del modelaje como Queen of Dark (reina de la oscuridad), pero no sólo por el color de su piel- que produce mucha melanina- sino por también ser defensora de la autoaceptación y hablar contra la discriminación basada en el color de la piel.
Aunque ahora goce de fama y éxito, su vida no siempre ha estado rodeada de glamour, pues como ella misma ha dicho, a lo largo de sus 26 años ha tenido que enfrentar humillaciones, críticas y burlas.
Su niñez la pasó entre los campamentos de refugiados en Etiopía y Kenia, por lo que nunca se avergonzó de su piel oscura, sin embargo, cuando su familia emigró a los Estados Unidos cuando tenía 13 años, su apariencia diferente la hizo el blanco de burlas.
“Yo pensaba que todo iba a mejorar. Estaba en una tierra libre, en América. Se me hizo muy extraño que las propias mujeres afroamericanas me molestasen por mi color de piel”, confesó la modelo a distintos medios de comunicación.
Esta vez, la maniquí se convirtió en tendencia en redes sociales por contar su historia, como una vez lo hizo en 2018 cuando compartió una peculiar interacción que tuvo con un conductor de Uber en Minnesota.
“Si te dieran mil dólares, ¿te blanquearías la piel?”, le preguntó el señor. Ella le respondió: «¿Por qué demonios blanquearía esta hermosa melanina con la que Dios me bendijo? No creerás el tipo de preguntas que recibo y el tipo de miradas que tengo por tener esta piel».
Sus seguidores la apodaron la Reina de la oscuridad, algo que ella acepta felizmente: «Me gusta el nombre, no hay nada malo con la oscuridad y ser llamada reina es la cereza del pastel. El negro no es el color de la tristeza o la muerte o el mal, es solo la forma en que ha sido retratado durante tantos años. Así que soy la reina de la oscuridad que trae luz y amor a quienes me rodean”.
En redes sociales, sus publicaciones van mas allá de reconocer la belleza exterior, pues también dan importancia a la aceptación de uno mismo y a reconocer sobre todo la belleza interior.