En 2018 Óscar Romero se vinculó con la Universidad Madero. Ese año el estudiante deportista originario de Puerto Vallarta se integró a UMAD para cursar una licenciatura y, de manera simultánea, para formar parte de los Tigres Blancos.

A su llegada, el integrante del Cuadro Ideal de los Ocho Grandes 2023, recibió el apoyo del coach Juan Manuel Solano y también de jugadores que, en aquella época, eran los de mayor experiencia, tales son los casos de Manuel Yáñez y Josué Rodríguez.

De ser un novato en el equipo maderista, Óscar Romero pasó a ser un jugador en desarrollo y de ahí a convertirse en referente del equipo, de tal manera que ahora, ya como estudiante de maestría, el felino se encuentra en la recta final de su estadía con el conjunto con el que celebró los campeonatos nacionales de las Divisiones 2 y 1 de la Liga de la Asociación de Basquetbol Estudiantil, esto en temporadas consecutivas.

En la última etapa de Romero como jugador universitario, él, uno de los referentes de Tigres Blancos UMAD y uno de los basquetbolistas más dominantes de la liga, realizó un recuento de su trayectoria como deportista de esta casa de estudios.

“Cuando llegué a UMAD veníamos de menos a más; era un proceso de mejora, de mucho trabajo y de impulsar al equipo a un lugar que parecía lejano, pero al que hoy, después de mucho esfuerzo, llegamos y estamos firmes. En esa primera temporada recibí el apoyo y los consejos de mi coach y de jugadores de experiencia como Manuel Yáñez y Josué Rodríguez, quienes me ayudaron a adaptarme al equipo y a la liga. Ahora que me encuentro del otro lado, puesto que soy de los jugadores de mayor experiencia, transmito eso que aprendí a jugadores que están pasando por sus primeras temporadas con el equipo”.

Óscar Romero se encuentra cerca de culminar su etapa como estudiante deportista, sin embargo, tras ser doble campeón nacional con UMAD, su deseo es celebrar un tercer título con el equipo que en 2023 se convirtió en el mejor conjunto colegial de basquetbol en México.

“Uno siempre piensa en lo más alto, pero sin perder el piso. Quiero un tercer campeonato, pero para eso se tiene que trabajar mucho y considerar varias cosas que pueden pasar. UMAD es mi casa y me siento muy feliz de estar aquí, estudiando y jugando en nuestro gimnasio”.