La Audiencia Provincial de Salamanca exoneró a un padre de familia de seguir pagando pensión alimenticia a su hija, una mujer de 29 años, ya que no estudia ni trabaja y no tiene relación afectiva con él.

Esta sería la segunda ocasión en la que el padre intentó deshacerse del pago, en 2018 solicitó la exoneración pero se desestimó en primera instancia su demanda.

Según información del portal La Vanguardia, el padre de familia le daba 125 euros mensuales, lo que significa unos 2500 pesos a cada una de las dos hijas de su antiguo matrimonio desde que se divorció de la madre de sus hijas en el 2005. En 2018 el hombre quiso dejar de pagar la pensión pero la justicia lo rechazó.

Dentro de los argumentos del padre se encontró la falta de interés de su hija en trabajar o buscar empleo. Ante la situación la sala concluyó que con 29 años cumplidos la joven: “mantiene un evidente y manifiesto desinterés por buscar un trabajo de forma activa y por trabajar, y si bien no tiene independencia económica, ésta solo es debida a su falta de diligencia e interés en la consecución de un empleo”.

La chica aseguró que padecía de un trastorno adaptativo mixto que le provocaba “ansiedad».

Fuente: Milenio