El suicidio es uno de los principales problemas de salud pública a nivel mundial, asociado a situaciones de salud mental como la depresión y la ansiedad generados por factores predisponentes como el abuso sexual, maltrato, bullying, entre otros.
Cuando la persona ha tenido varias pérdidas, en ocasiones existen complicaciones en el duelo, cuando no se está dispuesto a iniciar un proceso, por lo que utiliza mecanismos de defensa y negación.
Judith Varela Ríos, vicepresidenta de la Red de Suicidólogos en Latinoamérica, manifiesta que desde la tanatología, es importante que la persona pueda visualizar sus pérdidas para poder tener un conocimiento de sí mismo en sus crisis, el cómo reacciona y cómo interactúa con el otro y cuáles son sus mecanismos de defensa y de afrontamiento.
Asegura que el duelo es complicado partiendo del dolor, por lo que la persona continúa con su vida manejándose en el actuar de manera inconsciente a través de enfermedades, descuidos personales, problemas económicos, dificultades con la familia, en el trabajo y, si bien este tipo de manifestaciones no están relacionadas como tal con la pérdida, o con la naturaleza por la que la persona está con algunos rasgos depresivos, no los tienen conscientes.
“Al no tener esa conciencia, las personas actúan de una manera aparentemente normal entre comillas, pero los va llevando a tener ese tipo de manifestaciones”.
Indica que algunos autores, manejan la pérdida como la principal causa o la razón por las que una persona se quita la vida, ya sea la pérdida de objetos materiales, del amor, noviazgo, pérdida de los padres, de alguna situación o alguna mascota.
“Los adolescentes cuando ellos no tienen muy consciente esta parte de lo que perdieron como es la persona que amaste, duele demasiado que no son capaces de reconocer la pérdida”.
Falta de recursos para afrontar la situación
Explica que cuando existen situaciones predisponentes, si la persona de momento no tiene los recursos emocionales suficientes para afrontarlos, va a utilizar el suicidio como una opción al sentir ese vacío.
En un abuso sexual infantil o adolescente, la persona que lo vive en ese momento tiene una pérdida de su integridad, una pérdida del estado normal de su cuerpo y como un ciclo evolutivo normal, hay una alteración en el que hay un gran daño a nivel psicológico.
La pérdida del sentido de la vida, la disminución en la ingesta de comida, placer de las actividades que antes causaban alegría o satisfacción, incapacidad para poder percibir o sentir de manera consciente el momento del aquí y el ahora y la preocupación excesiva en el futuro, están relacionadas con la ansiedad.
“Algunas personas ya no planean porque ya no tienen ese sentido, hasta que poco a poco se ven solos sin ningún apoyo y es cuando optan por quererse quitar la vida”.
Asegura que cuando la depresión tiene más de dos meses, se instaura una conducta, es un poco más difícil desarraigarla.
Atención a tiempo
La especialista, resalta la importancia de dirigir el apoyo a la sociedad a través de una red de apoyo para niños, adolescentes y adultos.
“Si detectan que han tenido manifestaciones a nivel psicológico, físico, social, a nivel cognitivo, que también hay poca concentración, en cuanto se presenten todos estos síntomas, puedan acudir para que reciban un tratamiento oportuno”.
Consideró importante el apoyo de un psicólogo con orientación tanatológica y con perspectiva de suicidología, pues dijo, la tanatología para elaborar las pérdidas y duelos y la suicidología para la prevención del suicidio.
De igual manera, indicó que se considera también la logoterapia enfocada al sentido de la vida, la cual apoya a nivel existencial y espiritual no como religión sino como virtudes, valores y creencias.
“Sobre todo partiendo desde quien soy, hacia dónde voy, cómo me dirijo, partiendo desde el sentido de la voluntad y el sentido de la vida”.
Duelos arraigados provocan problemas en el presente
En los últimos años se ha incrementado el número de personas que acuden a solicitar alguna ayuda, ya que requieren tratar sus emociones, pues llegan con un móvil de consulta por situaciones maritales o con los hijos, sin embargo detrás de eso, aseguró existen muchos duelos que no se han resuelto.
“El estilo de crianza y el cómo me relaciono con el otro tiene también que ver con mis heridas, con todas las pérdidas significativas que he tenido a lo largo de mi vida”.
A partir de la pandemia, dijo, se han incrementado las enfermedades de salud mental, aumento que se ve reflejado porque hay mayor conciencia para solicitar ayuda y atención.
¿Dónde encontrar un centro de apoyo?
La vicepresidenta de la Red de Suicidólogos en Latinoamérica, dio a conocer que actualmente en Torreón cuentan con el Centro de Atención de Salud Mental, en donde se brinda el apoyo a personas que requieren de ayuda.
Las personas que no cuenten con recursos se les brinda la atención con una cuota voluntaria, llevando un artículo de limpieza, ya sea rollo, jabón, cloro, entre otros.
Señaló que actualmente dicho centro cuenta con apoyo de empresarios de la región, pues se mantiene de las donaciones.
Las personas interesadas pueden acudir a avenida Ocampo 1735, a una cuadra del bosque Venustiano Carranza.
Información vital
Daniel Leza Cepeda, psicólogo adscrito a la Unidad de Control y Gestión de la Fiscalía de Investigaciones Especializadas, Atención a Víctimas y Testigos, señala que aunque el acercamiento de las personas a las instituciones de salud mental para solicitar una consulta psicológica es reducida, cada vez las personas tienen mayor información respecto a la salud mental.
Menciona que cuando llegan a consulta, son ellos mismos los que hablan de ciertos síntomas, de situaciones como depresión o ansiedad.
A través de talleres y pláticas se trabaja con los medios de comunicación respecto a los problemas de salud mental como el suicidio, con el objetivo de identificar y difundir los factores de riego y sintomatologías para que la población pueda acercarse a solicitar ayuda.
El imaginario sobre suicidio es bastante estigmatizante, ya que la persona que tiene ideas o conductas suicidas suele ser señalada o apartada por otras personas, ya que en ocasiones es tratada como alguien que busca llamar la atención o que busca obtener algo a cambio como un chantaje.
Explica que muchas veces las personas que tienen pensamientos suicidas, de muerte o que ya han tenido intentos, en un tenor de vergüenza o de no querer ser juzgados omiten hablar del tema.
Resaltó la importancia de la información, por lo que dijo, falta seguir difundiendo sobre ello para que las personas conozcan los síntomas e indicadores, de tal manera que puedan identificarse y acercarse a alguna institución a solicitar ayuda.
“Hacerles ver que puede haber opciones, están las instituciones de gobierno, pero también se encuentran asociaciones civiles, incluso las escuelas de psicología que pueden iniciar con algunos tratamientos supervisados, hacerles saber que hay alternativas”.
Explica que cuando alguna persona tiene ideas o intentos de quitarse la vida, muestra la necesidad de ayuda, pero difícilmente la conducta tal cual tiene la intención consciente de la persona de pedirla, en ese caso cuando suceden este tipo de cosas, la persona se encuentra en un estado emocional alterado y lo que busca es alguna forma de eliminar su sufrimiento.
En lo personal, como especialista, manifiesta que la persona busca eliminar el sufrimiento y ante la posibilidad de hacerlo, un intento de suicidio, la búsqueda de eliminarse a sí mismo es una opción que le aparece, pero no es chantaje.
Cifra de personas que se quitan la vida supera la de los homicidios
El número de suicidios superó al de homicidios en el último año en Coahuila y Durango, según reveló un análisis del Observatorio Ciudadano de La Laguna a los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
“En el caso del estado de Coahuila, encontramos que en los últimos años han ocurrido más suicidios que homicidios. De hecho, si nosotros analizamos el 2022, comparado con las estadísticas que nos da el Inegi de mortalidad, se registran 169 homicidios en todo el año y un total de 312 suicidios en ese mismo periodo de tiempo”, declaró Luis Alfredo Medina, coordinador de Investigación en el organismo.
Detalló que el número de suicidios se ha incrementado 77% y que se registra prácticamente uno al día. Dijo que las estadísticas también muestran que el suicidio juvenil es un problema preocupante, pues representa la según da causa de muerte entre jóvenes de 15 a 29 años de edad.
En el último año fueron 111 suicidios, rebasados únicamente por 126 muertes ocurridas derivadas de accidentes.
“Sí es bastante preocupante y cuando lo analizamos por segmentos poblacionales, encontramos que en la parte de los jóvenes, de hecho, el suicidio es ya la segunda causa de muerte o la segunda principal causa de muerte en el estado de Coahuila”.
En Durango durante los últimos 7 años los suicidios se han incrementado un 35 por ciento y se registra uno prácticamente cada dos días. En 2022 fueron 153 suicidios contra 125 homicidios.
También es la segunda causa de muerte en jóvenes de 15 a 29 años, pues el año pasado hubo 61 suicidios, rebasados únicamente por 135 muertes causadas por accidentes.
“Y algo similar pasa en el estado de Durango, donde los suicidios han incrementado a tal grado de que también para el año 2022 se registran más decesos por esta causa que por homicidios. Y también en la parte de los jóvenes, si analizamos a detalle, estos son la segunda principal causa de muerte en los jóvenes de 15 a 29 años”, concluyó Luis Alfredo Medina.
Milenio