La Fiscalía General del estado alemán de Schleswig Holstein se ocupa de los trámites relacionados con la posible extradición a España del político catalán, Carles Puigdemont, quien se encuentra desde el domingo en prisión preventiva en Neumünster.

La decisión sobre la posible entrega del expresidente catalán al Tribunal Supremo español se prolongará probablemente más allá de esta semana, ya que los próximos días son festivos con motivo de la celebración de la Pascua en el país.

Las decisiones se tomarán después del próximo martes, de acuerdo a las estimaciones de una portavoz de las autoridades judiciales de Schleswig Holstein. Las autoridades alemanas, en términos generales, no suelen actuar con rapidez sino en forma escrupulosa en el terreno de las leyes.

La detención de Puigdemont el domingo por la tarde en la carretera A7 del Norte de Alemania tiene eco en la prensa del país europeo. Fuerzas policíacas especiales de ese estado así como agentes a cargo de la autopista pararon el auto en que viajaba en el tramo comprendido entre Schuby y Jagel, que son ciudadades fronterizas con Dinamarca.

El actual Ministro alemán de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, quien hasta hace un par de semanas fue el Ministro alemán de Justicia, declaró a preguntas de la prensa que el caso no es objeto de decisiones políticas sino que se trata de un procedimiento en el terreno de lo legal.

El diario alemán de derecha, Die Welt, comentó que las autoridades de Schleswig Holstein se echaron encima un asunto espinoso con la detención de Puigdemont. Varios partidos alemanes pusieron hasta ahora el acento de que no es un caso político sino del poder judicial. Otros opinan lo contrario.

El canal de la televisión de derecho público en Alemania, ARD, informó este martes en sus noticieros que resulta curioso que Puigdemont se les hubiera ido de las manos tanto a la policía finlandesa como a la de Dinamarca.

Ambos cuerpos policíacos reaccionaron en forma tardía o simplemente cerraron los ojos para dejarlo pasar, estimó ese servicio noticioso, uno de los principales de Alemania. Consideró que poderosos amigos políticos finlandeses posibilitaron que éste pronunciara un discurso en la Universidad de Helsinki, y que saliera del país.

La emisora radial de cobertura alemana, Deutschlandfunk, ínformó que el partido alemán que se pronunció en forma abierta en favor de la liberación de Puigdemont ha sido «La Izquierda».

En términos generales, algunos sectores de la izquierda alemana consideran que la jusiticia no tiene elementos para aceptar la extradición.

El gobierno alemán, por su parte, puso hasta ahora de relieve que no es un caso político sino exclusivamente judicial, por lo que serán esas autoridades las que tomarán la decisión.

La extradición de Puigdemont a España podría demorarse entre diez y 60 días y se llevará a cabo siempre y cuando en Alemania exista un delito similar al que le imputa la justicia española.

En España, Puigdemont está procesado por rebelión agravada, castigado con hasta 30 años de cárcel.