Evo Morales pidió a los bolivianos que frenaran los enfrentamientos que se han mantenido este lunes luego de que presentara ayer su renuncia a la presidencia.
«Pido a mi pueblo con mucho cariño y respeto cuidar la paz y no caer en la violencia de grupos que buscan destruir el Estado de Derecho. No podemos enfrentarnos entre hermanos bolivianos. Hago un llamado urgente a resolver cualquier diferencia con el diálogo y la concertación».
Grupos de choque que han perpetrado saqueos durante la madrugada todavía estaban activos el lunes, sobre todo en la vecina ciudad de El Alto, bastión de Morales. Sin embargo, las calles de La Paz lucían desiertas, con muy pocos autos y comercios cerrados. Varias puertas de edificios fueron protegidos con maderas y fierros.
En tanto, el líder opositor Carlos Mesa denunció que su casa iba a ser atacada.
«Muchas personas me alertan indicando que una turba violenta se dirige a mi domicilio para destruirlo. Solicito a la Policía Nacional que evite esa locura», escribió Mesa.
Más temprano, Morales se deslindó del caos que vive su país tras su renuncia y llamó a los líderes opositores a asumir su responsabilidad para regresar el orden.
Morales, quien renunció la víspera poco después de que el jefe del ejército se lo sugiriera y tras semanas de protestas por opositores que lo acusaron de encabezar un fraude electoral para quedarse un cuarto periodo en el poder, sostiene que su salida es resultado de un golpe de Estado, algo que sus rivales rechazan.
Con información de AP