La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo este martes que un informe que afirmaba que el Covid-19 había surgido en diciembre en Francia, antes de lo que se pensaba, no era «sorprendente», e instó a los países a investigar cualquier otro caso inicial sospechoso.
La enfermedad fue reportada por primera vez por las autoridades chinas a la OMS el 31 de diciembre y no se creía que se hubiera extendido a Europa sino hasta enero.
«Presenta una imagen completamente nueva de todo», afirmó el portavoz de la OMS, Christian Lindmeier, en una sesión informativa de la ONU en Ginebra, refiriéndose a los informes franceses.
«Los hallazgos ayudan a comprender mejor la posible circulación del virus del Covid-19», señaló. Asimismo, agregó que podrían surgir otros posibles casos anteriores después de volver a analizar las muestras.
Un hospital francés que volvió a analizar muestras antiguas de pacientes con neumonía descubrió que había tratado a un hombre que tenía Covid-19 el 27 de diciembre, casi un mes antes de que el Gobierno francés confirmara sus primeros casos.
Lindmeier alentó a otros países a verificar los registros de casos de neumonía de origen no especificado a fines de 2019, y dijo que esto le daría al mundo una «imagen nueva y más clara» del brote.
Cuando se le preguntó sobre los orígenes del virus en China, Lindmeier enfatizó que es «muy, muy importante» explorar el asunto.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, alega que su país tiene «evidencia» de que el coronavirus SARS-CoV-2 surgió de un laboratorio en Wuhan, China, aunque científicos informaron a la OMS que es de origen animal.
Las agencias de inteligencia de EU también han descartado que el virus fuera creado.