El candidato presidencial del PRI, José Antonio Meade, afirmó que el actual Gobierno logró reducir la violencia en los primeros años del sexenio, pero reconoció que el problema se agravó entre 2016 y 2017 en el norte, el Pacífico y la Península.
Ante empresarios del sector de comercio, servicios y turismo, asentó que la estrategia de seguridad debe replantearse y enfatizar la reconstrucción del tejido social, confiscar armas y dinero de los grupos delincuenciales.
Asimismo, aceptó que se deben homologar los Códigos Penales de todos los estados para facilitar la coordinación entre corporaciones policiacas.
«Claramente, un elemento vinculado con Estado de Derecho es seguridad, probablemente el más importante, el más central; la primera obligación que debiera tener un Gobierno es salvaguardar la integridad física y la integridad patrimonial», admitió.
«Hoy es una estrategia que tenemos que cambiar. Hoy el mexicano siente miedo en buena parte de su geografía, hoy está preocupado cuando sale a la calle, cuando toma el transporte público, cuando visita, incluso, un espacio turístico.
«Podemos encontrar algunos elementos, al tiempo de ver cómo ha evolucionado la inseguridad en México, que nos arrojen luz en términos de la dirección en la que tendríamos que cambiar nuestra estrategia».
En la sede de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur), el candidato tricolor mostró diapositivas que muestran que, a finales de la década del 90, el fenómeno de la violencia se desplazó del sur, empezando por Chiapas, hacia el norte, conforme evolucionó la producción de armas en Estados Unidos.
Afirmó que, mientras el país vivió un entorno estable de seguridad de 2000 a 2006, en el 2011, en el último tramo del sexenio de Felipe Calderón -de quien Meade fue colaborador-, se registró el peor pico de violencia en la historia, principalmente en el norte.
«En términos generales, la situación en el sur-sureste, notablemente en la Península, había mejorado, y había mejorado mucho. Del 11 al 17 vamos a ver dos momentos: primero, una recuperación, de nuevo, importante en materia de seguridad. Pero, a partir del 16 y 17, un incremento muy notable que nos ubica hoy ese mapa de violencia.
«No es el mismo que teníamos en el 2011. En el 2011, si recordamos el norte y Guerrero, si vemos el 2017 es una violencia que se mueve hacia el sur y hacia el Pacífico y que, por lo tanto, se ve reflejada en muchos centros turísticos relevantes, incluido Quintana Roo», describió ante los empresarios del sector terciario.
Meade enfatizó en que se deben activar mecanismos que faciliten la confiscación del dinero y las armas que llegan a la delincuencia, provenientes de Estados Unidos.
El abanderado describió que se estima que el crimen organizado en México tiene entre 500 mil y 1.5 millones de armas, casi tantas como las que posee el Ejército de Canadá, ilustró.
El ex Secretario de Hacienda ofreció capacitar a las Policías y mejorar los salarios de los elementos; agregó que fomentará a los emprendedores, facilitará la apertura de nuevas empresas y promoverá al país para atraer el turismo.
Con información de Reforma