El candidato de la coalición Todos por México a la Presidencia de la República, José Antonio Meade, planteó una corresponsabilidad entre el Legislativo y el Ejecutivo para evaluar las promesas de campaña.
Durante el primer debate presidencial en el Palacio de Minería, ofreció gobernar para la gente, para nadie más, y subrayó que cada una de sus propuestas tiene soporte financiero y viabilidad.
El abanderado de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza, expuso que el PRI por primera vez escogió un ciudadano honesto, preparado capaz y con experiencia, nominado además por los otros dos institutos políticos.