El alcalde de Huauchinango, emanado de Morena, Gustavo Vargas Cabrera, es acusado, esta vez, porque realizó de forma arbitraria cambios de área, despidos injustificados y recorte de salarios, así como de no otorgar prestaciones que por ley le corresponden a su administración, dichas acusaciones tomaron más importancia, porque quien las emite es su esposa y todavía presidenta del Sistema DIF municipal, Susana Espinosa Negrete.

El despido que se dio recientemente en esta administración es el de la directora de DIF, Mayra Hernández Velasco, quien el pasado lunes 18 de mayo, fue notificada para dejar su puesto, dicho oficio fue emitido por el contralor Ernesto Palmeros.

Hernández Velasco, hasta el momento, desconoce del porqué de su despido, pues ella era una pieza clave para este organismo, sin embargo, trascendió que fue removida porque entre el alcalde Vargas Cabrera y su esposa existe un pleito personal, que en este momento ya invadió el terreno laboral.

Tan ha subido de tono el pleito, que se sabe que el munícipe retiró la vigilancia personal a Susana Espinosa y un vehículo oficial que estaba destinado para las tareas específicas del DIF, así como prohibirle el ingreso al palacio municipal.

Personal de Seguridad Pública confirmó a este medio de comunicación que Édgar Santos es quien actualmente controla y autoriza el uso del parque vehicular del DIF y ambulancias.

Asimismo, Susana Espinosa ya ha pedido la intervención del gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta y de la presidenta honoraria del Patronato del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), María del Rosario Orozco Caballero, mediante el oficio número 0055/SDIF/2020, para que se investigue el actuar del primer regidor del municipio de Huauchinango, contra el personal de este organismo público.

Para finalizar, ha trascendido que Gustavo Vargas busca la salida de Susana Espinosa, para nombrar en su lugar a Penélope Rivera, pues se sabe es su actual pareja.