Ante la curva ascendente no exponencial en el número de casos de COVID-19 en la entidad, el gobernador Miguel Barbosa Huerta llamó a las y los poblanos a no relajarse y comprometerse más para enfrentar esta enfermedad.
En videoconferencia de prensa en Casa Aguayo, el titular del Ejecutivo recordó que aún no existen condiciones para regresar totalmente a la normalidad, pues la pandemia todavía no está controlada a pesar de los anuncios de que ya hay una vacuna.
En este sentido, consideró que el proceso de aplicación será complejo, ya que alrededor de 10 millones de mexicanos podrían administrársela mensualmente.
Barbosa Huerta reconoció que será difícil parar nuevamente las actividades económicas en caso de que la entidad regrese nuevamente a semáforo rojo. Por tal razón, también pidió a las y los empresarios que cumplan con las medidas de prevención para evitar más contagios.
En su intervención, el subsecretario de Transparencia y Gobierno Digital, Jesús Ramírez Díaz explicó que Puebla capital y la zona conurbada están en color naranja en el semáforo epidemiológico estatal. Lo anterior, dijo, refiere que existe un riesgo alto de contagio y con un número de casos con tendencia ascendente.
Indicó que las otras cinco regiones están en riesgo medio; es decir, color amarillo y a la baja. En este sentido, reiteró el llamado a reforzar todas las medidas a partir del “Pacto Comunitario” impulsado por el mandatario.