La diputada federal Carolina Viggiano Austria (PRI) presentó ante el Pleno de la Cámara de Diputados una iniciativa que modifica el Artículo Cuarto de la Constitución Política para establecer que todas las personas mayores de 60 años y más reciban por parte del Estado una pensión no contributiva, como reconocimiento a este grupo social y que hoy más que nunca requieren apoyo.
Desde la tribuna del Palacio de San Lázaro, fundamentó que durante la pandemia de Covid-19 las personas adultas mayores enfrentaron una disminución en su línea de bienestar, tanto en las zonas rurales como en las urbanas, hasta en un 62 por ciento, además de que ha disminuido la esperanza de vida de los mexicanos, pasando de 75 a 71 años, lo que representa una regresión de casi tres décadas.
Puntualizó que este grupo vulnerable, de acuerdo con datos del Inegi, representa a más del 12 por ciento de la población del país y puede incrementarse al doble en los años que vienen. Además, anotó, este beneficio incluiría a las personas indígenas y afrodescendientes, para evitar segregación por necesidad o discriminación particular.
“Si logramos ajustar la línea de retiro a los 60 años, también beneficiaremos al flujo del mercado laboral, a la salud pública y la economía de millones de familias que encontrarán un apoyo más en el sistema de cuidado”, destacó la legisladora.
Los 144 mil millones más que se tendrían que invertir, explicó, se pueden tomar de los sobrecostos del Tren Maya, del apoyo a Pemex para pagar su deuda y del gasto superfluo de las secretarías que han engrosado su burocracia.
La también secretaria general del PRI indicó que, en México, desde 2007, se ha buscado dar respuesta institucional a través de la pensión de adultos mayores, a fin de aliviar económicamente a las familias y mejorar su situación de vida.
“El presidente Enrique Peña Nieto la propuso en 65 años y más. El actual gobierno inició proponiendo que fuera de 68 años, luego la redujo a 65. Hoy el Grupo Parlamentario del PRI propone que sea de 60 años y más, pues se ha discriminado a un sector vulnerable que se encuentra entre los 60 y los 68 años”, subrayó.
Por lo anterior, Viggiano Austria llamó a que la propuesta de reducción de la edad para las pensiones no contributivas sea abordada con rigor académico, análisis económico y, sobre todo, con un lente de equidad social, no político.
Foto: Cámara de Diputados