El diputado federal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) José Guadalupe Fletes Araiza, aseguró que los ideales plasmados en el Plan de Ayala siguen presentes en la tierra y la libertad, porque, expresó, más allá de los símbolos de nuestra revolución, están los cimientos de un país moderno y organizado.
Al conmemorar este día, 110 años de la promulgación del Plan Ayala, el legislador priista sostuvo en la construcción del México moderno, el territorio nacional fue dividido en tierras comunales que les pertenecían a los pueblos indígenas. Ahí, detallado, se desarrolló la cultura de las localidades y se fortaleció la identidad de nuestro.
Sin embargo, precisó, la creciente inestabilidad política, causó movimientos territoriales bajo decretos presidenciales, que pretendían despojar a las familias de sus tierras y construir nuevos mandos. En este escenario, resaltó, estaban Emiliano Zapata y Otilio Montaño, que bajo el lema de «Libertad, Justicia y Ley», construyeron una estrategia que años después detonó en todo el país.
El diputado priista dijo que este pasaje marcó a Emiliano Zapata, el caudillo del Sur, como impulsor del primer cambio político en más de 30 años de la mano de Francisco I.Madero, quien después no reconoció los acuerdos que la comunidad campesina les habría dado y se generó un levantamiento de grandes convergencias.
El representante del partido tricolor manifestó que esta lucha lo que buscaba era una inclusión política que reconociera el verdadero trabajo del campo y no pretendiera imponer condiciones forzadas bajo una reorganización de la sociedad. Para Zapata, indicó, esto representaba el movimiento que había nacido bajo la idea de la Revolución Mexicana.
De este modo, el legislador José Guadalupe Fletes Araiza sostuvo que las políticas agrarias y el reconocimiento político de todas las comunidades son el día de hoy instrumentos construidos en el origen de nuestro Estado moderno. Compromiso, afirmó que refrenda el Partido Revolucionario Institucional con cumplir los ideales de la revolución y con seguir evolucionando bajo las deudas del México moderno.