Algo tan común como una conexión de Tinder entre un chico y una chica antecedió el trágico destino de Jennifer St. Clair, una joven del sur de Florida que murió tras ser atropellada nueve veces debido a la negligencia de Miles McChesney.
Tras conocerse a través de la aplicación para citas, ambos de 33 y 34 años respectivamente, quedaron con el plan de tomar algunos tragos en los bares del centro de Delray Beach. Se trataba de una triple cita en la que McChesney junto a su nueva amiga, y otras dos parejas pasarían una noche de fiesta y adrenalina ya que todos iban en tres motocicletas.
McChesney procede de Nueva York y se encontraba en Florida visitando a su primo. La suya era una Harley Davidson de 1991 prestada con la que quiso impresionar a St. Claire cuando la recogió de su casa en Fort Lauderdale. Según las autoridades, tras la fiesta y a alrededor de las dos de la madrugada se produjo el fatal desenlace.
Las tres parejas se desplazaron con sus motos y en un momento dado Jennifer cayó al asfalto. McChesney no frenó para socorrerla y el cuerpo de la joven fue atropellado en nueve ocasiones en la I-95, a la altura de Atlantic Boulevard en Pompano Beach, tal y como publicó el Miami Herald.
“De alguna forma salió despedida de la motocicleta y pasaron por encima de ella nueve veces”, aseguró Todd Falzone, abogado de la familia de la víctima. “Entendemos que en el suceso hubo consumo de alcohol. Alrededor de las 10 am, a horas de los sucedido, el abogado de Mr. McChesney contactó con las autoridades (Florida Highway Patrol) afirmando que su cliente solo hablaría si se le ofrecía inmunidad completa”, prosiguió Falzone convencido de que esa opción es inviable.
Según un testigo, un hombre a los mandos de una motocicleta se paró frente al cuerpo y luego se marchó.
“Mr. McChesney bebió alcohol hasta el punto en que perdió el control. Operó la moto de manera negligente y no dio auxilio a Jennifer, la dejó en la autopista. El primo de McChesney, Bill Young, fue quien llamó al 911.
“Cuando se dio cuenta de que Jennifer no estaba sobre la Harley, su primo se echó a un lado y llamó al 911”, detalló Falzone. “Pero después el hombre que llevaba a Jennifer se acercó y gritó a la Policía: ‘Aquí está, olvídalo’. Y colgó el teléfono”.
McChesney había salido de prisión recientemente, concretamente hacía el 28 de noviembre, nueve días antes del trágico suceso