“Centrarse en la salud de uno mismo comienza por adoptar medidas de autocuidado; esto significa hacer ejercicio regular, dormir bien, tener una alimentación nutritiva, procurar vínculos afectivos y reducir el estrés”, indicó el titular de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama), Juan Manuel Quijada Gaytán.
En el Día Internacional del Autocuidado, Quijada Gaytán dijo que promover el autocuidado significa que las personas adquieran conocimientos, desarrollen herramientas y estrategias que les permitan resolver los problemas cotidianos, controlar el estrés e identificar señales que pueden desencadenar una crisis de salud mental.
Señaló que “cuando el trabajo nos sobrepasa o estamos bajo mucha presión, no prestamos atención a nuestra salud mental. Por ello, desde la Conasama buscamos generar consciencia entre las personas, que sepan que pueden desarrollar habilidades para enfrentar problemas y mantener un estilo de vida saludable”.
El titular de la Conasama precisó que está a disposición de todas las personas la Línea de la Vida, que brinda orientación sobre estilos de vida saludable e intervenciones breves a través del número telefónico 800 911 2000; también se cuenta con 341 Centros Comunitarios de Salud Mental y Adicciones en el país.
Asimismo, en el plan de trabajo sectorial se encuentran en coordinación la Conasama y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para fortalecer los servicios de salud mental y promover su cuidado a través de la campaña “Vive saludablemente bit.ly/3O8mmgG.
Con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) se puso en marcha el Programa Integral de Salud Mental en las más de mil 400 unidades médicas del instituto en todo el país, con el propósito de fortalecer acciones para prevenir y atender la depresión.
La Conasama promueve cinco medidas de autocuidado:
El documento Integrando el Cuidado de la Salud Mental en la Atención Primaria, de la Organización Mundial de la Salud (OMS) bit.ly/3K69Kp9 señala que el autocuidado es la base y punto central, ya que implica la capacidad de las personas de promover la salud, prevenir enfermedades y hacerles frente con o sin el apoyo de profesionales.