El senador Alejandro Armenta Mier propuso que la deuda pública del Gobierno Federal sea pagada con un porcentaje de los recursos obtenidos por el aprovechamiento de las concesiones mineras de litio, metales preciosos y estratégicos del país.

En la iniciativa, que busca reformar la Ley Federal de la Deuda Pública, el legislador de Morena también planteó que se debe cuidar que los recursos procedentes de financiamientos constitutivos de la deuda pública se destinen a inversión en seguridad, salud y educación para potenciar el desarrollo económico y social de México.

Al presentar el proyecto ante el Pleno de la Comisión Permanente, Armenta Mier destacó que el Congreso de la Unión dio un paso importante al aprobar que la rectoría del litio estará a cargo del Gobierno Federal, pues reiteró que los yacimientos que hay en el territorio nacional equivalen a 4.5 veces el valor de la deuda externa.

Por ello, con esta modificación a la Ley Federal de Deuda Pública se garantizará que una parte de los rendimientos, productos y aprovechamientos que genere el litio, se ocupen para pagar la deuda externa, subrayó.

Alejandro Armenta expuso que se estima que las 31 concesiones mineras que México entregó a empresas inglesas, canadienses, australianas, españolas, estadounidenses, así como los yacimientos de litio, equivalen a 53 billones de pesos.

En contraste, dijo que de 2000 al 2021 se pagaron 7.6 billones de pesos tan sólo por servicio de la deuda externa, sin amortizarla. En el 2000 pagamos 215 mil millones de pesos; para el 2010, 300 mil millones de pesos, mientras que, en 2016, México pagó 478 mil millones de pesos, y en 2018, 664 mil millones.

En ese sentido, el presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público recordó que China compró una concesión de litio en Sonora a una empresa canadiense por un monto de siete mil 400 millones de pesos, “sin que un sólo peso llegara a manos de nuestra nación”, por eso, insistió, esta iniciativa busca que los recursos que se obtengan por el aprovechamiento de litio se destine un porcentaje al pago de la deuda externa, en lugar de regalar el dinero.

La propuesta se turnó a las comisiones unidas de Hacienda y Crédito Público y de Estudios Legislativos Segunda, de la Cámara de Senadores.